Universidades chinas entre las 100 mejores
Cuatro centros de estudios superiores de la República Popular China calificaron entre las 100 mejores del mundo.
Las universidades chinas de Tsinghua, Pekín, Zhejiang y Shanghái Jiao Tong se situaron este año entre las cien primeras del conocido como “Ranking de Shanghái”, una de las clasificaciones académicas más reconocidas a nivel mundial.
La reputada universidad pequinesa Tsinghua, ubicada en el puesto 43 (dos puestos más arriba que el año pasado), es la primera de las 154 instituciones de educación superior que la República Popular China tiene entre las mil mejores del mundo.
La Universidad de Pekín aparece en el puesto 53, Zhejiang, en el 70, y Shanghái Jiao Tong, en el 82.
En el caso de esta última, se trata de la primera vez que entra entre las cien mejores del mundo, mientras que la Universidad de Shenzhen, en el sur del país asiático, logró clasificarse entre las 500 mejores por vez primera.
La Clasificación Académica de Universidades del Mundo, elaborada cada año por la Consultora Shanghai Ranking –que se describe a sí misma como “organización independiente para la investigación de la educación superior”–, sitúa a las universidades estadounidenses de Harvard, Stanford y la británica de Cambridge como primera, segunda y tercera mejores del mundo, respectivamente.
La clasificación tiene en cuenta parámetros de calidad como número de publicaciones en revistas internacionales de prestigio reconocido (con especial atención a revistas como Science o Nature) y el número de citas de los trabajos de sus investigadores.
También considera el número de premios Nobel o medallas Fields (de Matemáticas) que imparten clase en sus aulas o han estudiado en ellas.
China tiene, por lejos, el mayor sistema de educación superior del mundo, con casi 30 millones de estudiantes repartidos entre 2,000 universidades públicas y aproximadamente 1,000 instituciones privadas
LIGA C9
LA ALIANZA DE LAS UNIVERSIDADES DE CIENCIAS Y TECNOLOGÍA, TSINGHUA, PEKÍN, FUDAN, ZHEJIANG, NANKÍN, SHANGHÁI, XIAN JIAO TONG Y EL INSTITUTO HARBIN.