CAPTURAN ESTRUCTURA DE SICARIATO EN ORIENTE
Mataron 85 pandilleros, colaboradores y particulares entre 2016 y 2017. Supuestamente participaban 14 policías y 25 particulares, de los que 22 fueron arrestados.
Una estructura de 11 policías y 11 particulares dedicados al sicariato fue capturada ayer por elementos de la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fiscalía General de la República (FGR) en los departamentos de Usulután y San Miguel.
El fiscal general de la república, Raúl Melara, dijo que la fiscalía generó 39 órdenes de captura, siendo efectivas para 22 de los involucrados. La estructura estaba compuesta por 14 policías, de los que tres están prófugos, y 25 particulares; entre ellos, cuatro expolicías.
Los delitos, según las autoridades, eran cometidos por encargo contra de 85 víctimas, entre ellos pandilleros, colaboradores de pandillas y particulares.
“Todos estos delitos han sido cometidos por personas que estaban destinados a proteger la vida de los salvadoreños. No merecen llamarse policías, no merecen manchar el nombre de la institución que los formó y a la cual servían”, afirmó el fiscal general.
El ministro de Justicia y Seguridad Pública, Rogelio Rivas, dijo que entre los detenidos están el hermano y el padre del principal sospechoso del feminicidio de la agente Carla Ayala, Juan José Castillo Arévalo, también conocido como “Samurái”, quien está prófugo desde diciembre de 2017; sin embargo, dijo que la estructura no está relacionada con ese caso.
“Este caso hay que separarlo del de la agente Carla Ayala, es un caso completamente diferente”, aclaró el ministro de Seguridad.
El director de la policía, Mauricio Arriaza Chicas, dijo que los 14 agentes supuestamente involucrados están destacados en la Sección Táctica Operativa (STO) de Usulután y San Miguel; en la Uni
“Estos delitos han sido cometidos por destinados a proteger la vida. No merecen llamarse policías, no merecen manchar el nombre de la institución”.
RAÚL MELARA,
FISCAL GENERAL DE LA REPÚBLICA.
dad Táctica Especializada Policial (UTEP), también conocida como Jaguares, y en el extinto Grupo de Reacción Policial (GRP).
La estructura enfrenta cargos por 21 homicidios individuales, un quíntuple, un cuádruple, dos triples y seis dobles; 22 casos de agrupaciones ilícitas, 18 homicidios tentados, cuatro homicidios agravados, cuatro coautorías en fraude procesal y tres privaciones de libertad.
Los delitos, de acuerdo con Melara, ocurrieron entre 2016 y 2017 en la zona oriental del país.
Los policías detenidos son: Vidal Antonio Alfaro Flores, alias “el Gato”; Prudencio Mejía Serrano, alias “Lencho”; José Dolores Coreas; David Antonio Chévez Cruz, alias “Chebo”; Pedro Antonio Pineda Bonilla, alias “UMO”; Carlos Roberto Sorto Cruz, alias “Sorto”; Óscar Ovidio González Claros, alias “Talibán”; Roberto Carlos Cortez Rodas, alias “Roditas”; Edgar Isaac Aparicio Chávez, alias “El Macizo”; Noé Benigno Castillo Mejía, alias “Benigno”; y Wilfredo de Jesús Serrano Hernández.
Mientras que los civiles detenidos fueron identificados como Juan José Castillo Arévalo, o Alex Pineda; Joel Isaac Castillo Arévalo, alias “La Linda”; José Romeo Valenzuela; Juan Antonio Beltrán Granados, alias “La Virgen”; Miguel de Jesús Pineda Flores, alias “Miguel La Petra”; Erlin Noel Bernal Maravilla, alias “Primo Erlin”; José Óscar Rodríguez González, alias “Oscarín”; y Víctor Manuel Mejía, alias “Papita”.
“Esta no es la única estructura del crimen organizado que se dedica al sicariato, esta es la primera de las capturas”, agregó Melara.
POLICÍAS A PRISIÓN
De tres a 48 años de prisión es la condena que recibieron seis policías en febrero de 2018 por pertenecer, junto a 15 particulares, a una estructura de sicariato que mató 10 pandilleros entre 2014 y 2015. Fue la primera vez que policías fueron condenados por ejecuciones extrajudiciales; los sicarios recibían entre $100 y $1,000 por cada homicidio.
Los policías condenados fueron: Élmer Rodríguez, alias “Chucho”; Gerardo Rivas, alias “Cabo”; Víctor González Cuéllar, alias “UTO de Lourdes”; Joaquín Arévalo, alias “Gato”; Fidel Galán Hernández y Nelson Lule Zepeda.