James Hetfield, TODO EL MUNDO A SU ALREDEDOR ES FELIZ MENOS ÉL
Las juergas de Metallica eran tan míticas que, cuando sus fan les apodaron “Alcohollica”, ellos se hicieron camisetas con este sobrenombre. “Destrozábamos camerinos porque era lo que se esperaba de nosotros”, confesó James Hetfield, cantante, compositor y guitarrista. Y añadió: “Luego te llegaba la factura. Al acabar la gira no teníamos dinero porque lo habíamos gastado en reponer los muebles. El promotor nos dijo que había tenido la misma conversación con Sid Vicious y Keith Moon y yo pensé que eso me gustaba mucho. Pero luego recordé que ambos están muertos. Estaba claro que tenía que solucionar mis m**rd*s”.
Los ingresos en clínicas de desintoxicación siempre se cuentan en tercera persona, porque el paciente no está en condiciones de explicar nada, con una célebre excepción: Hetfield en el documental de 2004 “Some kind of monster”. Lo que iba a ser un reportaje promocional sobre la grabación del octavo álbum acabó convertido en una sesión de terapia con un salto temporal de 10 meses en medio para que el cantante retomase el control sobre su vida. “No les caería bien si supieran todas las cosas horribles que he hecho, cosas vergonzosas y oscuras, algunas las he sacado de mis padres llevándolas más lejos”, expresó.
Hace unas semanas, la banda canceló su gira por la recaída de Hetfield en el alcohol, quien esta vez guardó silencio, mediante un comunicado firmado por los otros tres integrantes, confirmaban que James había ingresado en rehabilitación por segunda vez. Llevaba sobrio 17 años. Metallica pospuso sus conciertos para mayo de 2020. La lucha contrarreloj de Hetfield ya está en marcha.
Del matrimonio entre un camionero y una cantante de ópera solo podría salir un hijo rockero. Además ese matrimonio practicaba la ciencia cristiana y así fue