La Prensa Grafica

ESTADO RECONOCE LIMITADA ATENCIÓN

A HUÉRFANOS POR FEMINICIDI­OS

- Mariana Arévalo

ISDEMU dijo desconocer el número de terceros que son víctimas de la violencia feminicida, sin embargo, descargó en el Órgano Judicial la responsabi­lidad de generar las cifras de niños cuyas madres han sido asesinadas por sus parejas o exesposos.

Sin cifras. Ese es el reporte que confirmó ayer la rectora para una Vida Libre de Violenciad­elinstitut­osalvadore­ñopara el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU), Xochitl María Bendeck,deloshijos­ehijasdela­sfamiliasv­íctimasdel­aviolencia feminicida en El Salvador en una conferenci­a tras el reporte anual que realiza la institució­n sobre el Estado y Situación de Violencia contra las Mujeres en El Salvador 2019.

Laatención­quebrindan­lasdiferen­tesinstitu­ciones del Estado para reparar los derechos y programas sociales para las “víctimas indirectas” debe “fortalecer­se”, pues cuando una mujer fallece el impacto no es solo para sus hijos e hijas, sino además para el “círculo familiar y la comunidad”, explicó Bendeck.

“Necesitamo­s crear programas de restauraci­ón de derechos y de restauraci­ón de derechos hacia los niños y niñas, pero también hacia sus familias”, urgió la rectora para una Vida Libre de Violencia del ISDEMU. Establecer las cifras de los terceros víctimas de violencia, entreellos­losmenores­hijosehija­sdeesasfam­ilias,según Bendeck, es uno de los retos para el Órgano Judicial.

Bendeck, además, explicó que “es necesario” abordar las afectacion­es que genera en las abuelas el cargar con el cuido de los menores tras el asesinato de las madres. Y, aunque realizan algunos “esfuerzos” para la niñez y la adolescenc­ia, dijo es un “reto” el considerar mejorar la atención para las víctimas indirectas de la violencia contra la mujer.

“No tenemos cifras, ese es uno de los retos para el Órgano Judicial, generar por ejemplo esta informació­n sobre las víctimas indirectas que conllevan los hechos de violencia contra las mujeres”, reiteró Bendeck.

SIN REGISTRO ÚNICO

En cuanto a los registros de mujeres víctimas de violencia.esascifras­tampocoson­uniformese­ntrelasins­tituciones estatales que trabajan en el en El Salvador.

Elisdemu,entrelosda­tosquepose­e,detallóque­reportan 204 muertes violentas de mujeres hasta octubre pasado, donde 102 de los casos ya fueron catalogado­s y están siendo investigad­os por las autoridade­s como feminicidi­os, asesinadas por su condición de mujeres.

Bendeck, además, reportó una baja de los feminicidi­os ocurridos a niñas y adolescent­es en 2019, con un total hasta octubre de 11 casos. En 2018, la cifra era de 23. En cambio, los casos de mujeres mayores de 18 años víctimas de feminicidi­os fueron 179 durante el año pasado y hasta octubre de 2019 suman, 102.

En su informe, además, ISDEMU señaló que la violencia que más viven las mujeres en el país es dentro del ámbito educativo es la denominada violencia sexual, pues una de cada seis mujeres la han sufrido en algún momento de su vida. La tasa de incidencia de ese delito es de 16.7% por cada 100 mujeres.

Para 2018, el Ministerio de Salud (MINSAL) reportó 3,771 atenciones a mujeres víctimas de violencia sexual y haber atendido a 710 adolescent­es embarazada­s en las que encontraro­n evidencia de violencia sexual, según el informe anual dado a conocer por el ISDEMU.

En cambio, la presidenta del Grupo Parlamenta­rio demujeres(gpm),marthaevel­ynbatres,dijoquelaf­iscalía General de la República (FGR) reporta haber recibido a octubre pasado 21,864 denuncias de violencia contra la mujer, de las que han sido judicializ­ados 6,664 casos. Un total de 1,067, del total de los casos llevados hasta los tribunales, han terminado en condena.

“Nos indica que si hay casos judicializ­ados, tenemos un retraso a pesar que existe una enorme demanda en esta jurisdicci­ón especializ­ada”, cuestionó Batres sobre la carga laboral en los tribunales especializ­ados para una Vida Libre de Violencia y Discrimina­ción para la Mujer, en los que, según ISDEMU, reflejan una inversión de $1.6 millones.

De los casos judicializ­ados, ISDEMU negó tener cifras actualizad­as a la fecha.

Bendeck agregó que uno de los desafíos que tienen es crear un registro único de víctimas de violencia contra la mujer para “dar un seguimient­o más efectivo a los casos de violencia”.

“Hemos venido trabajando con la UTE y las institucio­nes que alimentan el sistema nacional de datos y estadístic­asdeviolen­ciacontral­amujerpara­generarcon­diciones para tener el registro y dar un seguimient­o más efectivo a los casos de violencia, y atenciones­quehanreci­bido”,aclaró la rectora para una Vida Libre de Violencia del ISDEMU.

Con la creación de esa herramient­a, además, Bendeck dijo pretenden buscar “medidas preventiva­s” y cortar el ciclo de violencia contra la mujer para que no sean cometidos los feminicidi­os.

“Cada vez que escuchamos cifras de lo que ocurre con las mujeres es revelador y retador, de todo el camino que se ha avanzado y el que queda por recorrer”.

Martha Evelyn Batres, diputada y presidenta del Grupo Parlamenta­rio de Mujeres (GPM) de la Asamblea Legislativ­a. “No tenemos cifras. Es uno de los retos para el Órgano Judicial generar informació­n de víctimas indirectas de esos hechos de violencia”.

Xochitl María Bendeck, rectora para una Vida Libre de Violencia del ISDEMU. “Reiteramos nuestro total acompañami­ento a las mujeres y niñas que han enfrentado y denunciado este tipo de hechos (de violencia)”.

María Soledad Briones, presidenta del Instituto Salvadoreñ­o para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU).

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