Procesan a tres policías por exigir $1,700 de “renta” en dos negocios
La Fiscalía dijo que dos dijeron ser agentes de la PNC y otro un fiscal. Solo uno de los tres fue identificado por los testigos como extorsionista.
“Ninguno de los testigos ofrece decir que esos que han capturado son las personas que vinieron a extorsionarnos aquí”. ABOGADO DEFENSOR, DEL CASO.
El agente Moisés David Martínez Landaverde, de 31 años, fue enviado ayer a prisión provisional; mientras que sus compañeros Jaime Oswaldo Salazar Cáceres, de 46, y Carlos Roberto Alférez Salguero, de 52, serán procesados en libertad, con algunas restricciones, por el delito de extorsión agravada. Así lo decidió ayer el Juzgado Quinto de Paz de San Salvador. La Fiscalía General de la República (FGR) acusa a los agentes de exigir $1,700 a dos víctimas en negocios ubicados en las cercanías del centro comercial Metrocentro, en San Salvador.
Las autoridades relataron que los agentes llegaron a dos locales comerciales el 18 de noviembre pasado, y exigieron a las víctimas entregarles la documentación correspondiente, y tras verificar los documentos en “regla”, demandaron que las víctimas les dieran $700 y $1,000, respectivamente.
A la víctima que le pidieron $700, los agentes supuestamente llegaron al negocio con gorros pasamontañas y uniformes policiales. En cambio, ante la segunda víctima, se presentaron solamente con los distintivos de la corporación policial, según la acusación fiscal.
Durante el hecho, según relataron los testigos durante la audiencia inicial, dos de los acusados se identificaron como agentes de la policía, mientras que Martínez Landaverde dijo ser miembro de la Fiscalía General de la República (FGR).
Ese mismo 18 de noviembre, de acuerdo con las autoridades, una de las víctimas entregó $500 a los agentes. Las víctimas aclararon que los policías les otorgaron hasta el 22 de noviembre de plazo para pagar el resto. Sin embargo, los imputados volvieron al lugar el 23 de noviembre por el dinero. Ese mismo día, fueron capturados en flagrancia en la avenida
Mérida, en la colonia Monserrat, de San Salvador.
La defensa dijo que a ninguno de los agentes les incautaron los supuestos gorros pasamontañas y que cuando fueron capturados, estaban vestidos como civiles. Los tres agentes, según el abogado defensor que pidió no ser identificado, estaban juntos al momento de la detención porque uno de ellos buscaba “un dinero” que le iba a dar a otro de los agentes “en calidad de préstamo” para reparar un vehículo. Ese agente, según su versión, nunca estuvo donde supuestamente ocurrió la extorsión.
Las autoridades detallaron que Martínez Landaverde fue “individualizado” por los testigos, por lo que le impusieron detención provisional. A los dos otros agentes, sin embargo, ninguna de las víctimas los logró identificarlos, por lo que seguirán el proceso en libertad con algunas restricciones que les impuso ayer el juzgado del caso.