CNP se abre a más empresas de la industria
El Consejo Nacional de la Publicidad representa a los anunciantes, agencias y medios de comunicación. La nueva directiva ha impulsado cambios dentro del mismo.
El Consejo Nacional de la Publicidad (CNP) aprobó nuevos estatutos, que permiten que empresas de todo tipo y tamaño, relacionadas con la industria publicitaria, puedan ser parte de este. Tradicionalmente lo conformaban la Asociación de Medios Publicitarios Salvadoreños (AMPS), la Asociación de Anunciantes de El Salvador (ANAES), y la Asociación Salvadoreña de Agencias de Publicidad (ASAP).
Sin embargo, con los nuevos estatutos cualquier empresa de estos tres rubros u ONG puede asociarse directamente. El CNP es una organización sin fines de lucro que representa a la industria publicitaria del país, vela por la autorregulación publicitaria, y el respeto a la ética publicitaria, así como a los códigos de autorregulación específicos de ciertas categorías de productos.
Fundado hace más de 50 años, el Consejo convirtió a El Salvador en pionero en cuanto a entidades de autorregulación, una tendencia que cada vez se extiende más en el mundo, explica Sherman Calvo, actual presidente del CNP. “La autorregulación no equivale a libertinaje de expresión“, afirma, “se busca que se cumplan los principios de legalidad, veracidad y honestidad en el mensaje publicitario.”
EL CAMBIO
El CNP aprobó sus nuevos estatutos el año pasado, con el objetivo, principalmente, de darle a la entidad mayor independencia y autonomía. Además de abrirse para que empresas de medios, anunciantes y la comunidad de empresas de comunicación puedan asociarse individualmente, se cambió la forma en la que puede constituirse la junta directiva y se amplió cada periodo a dos años.
“El cambio de los estatutos permite la apertura a organizaciones no gubernamentales relaciorregulación. nadas con la industria, y a otras empresas que no necesariamente sean socias de las gremiales tradicionales“, precisó Calvo.
El Consejo cumple varias funciones, pero la más importante es administrar el sistema de autorregulación publicitaria del país. Esto incluye emitir fallos, administrar procedimientos, realizar monitoreos constantes, emitir criterios sobre casos, y lo que denominan “copy advice“, o sugerencias para cambios de piezas que puedan rayar en el abuso.
Además, emiten los estándares y códigos de auto“Se tiene un Código de Ética, pero también estamos trabajando para desarrollar códigos específicos para las diferentes categorías”, indicó el también presidente de la ASAP.
Por otra parte, fungen como representantes de la industria publicitaria ante las entidades de Gobierno. Realizan monitoreos de políticas públicas y reformas que se discuten en la Asamblea Legislativa y que pueden afectar al sector, además de hacer cabildeo con las autoridades, y ejercer una corregulación con instituciones como la Defensoría del Consumidor y el Ministerio de Gobernación. “Cuando se reciben denuncias de publicidad engañosa u otras denuncias en materia publicitaria, se escucha la opinión del CNP, aunque no sea vinculante“, precisó Calvo. “El CNP también funge como vocero de la industria y como mediador para solucionar conflictos entre competidores.”
El presidente del CNP insiste en que el centro de todo es la defensa del consumidor, y el cumplimiento de estos principios de legalidad, veracidad y honestidad, y con ello en mente se crea conciencia entre las empresas de que los abusos en materia publicitaria son en realidad contraproducentes, pues generan rechazo de parte del público. Esto es parte del mensaje que también transmiten a través de capacitaciones a empresas y la información oficial que ofrecen, al público en general, con respecto a la autorregulación publicitaria.