CAMPAÑA EN ESTADOS UNIDOS ENTRA EN RECTA FINAL
Más de 59.1 millones de estadounidenses ya emitieron su voto de manera presencial o por correo.
La campaña presidencial para ocupar la Casa Blanca entró en su última semana previo a las elecciones del próximo martes 3 de noviembre, donde se definirá si el presidente Donald Trump logra la reelección por cuatro años más o si, por el contrario, será reemplazado por el demócrata, Joe Biden.
Según el medio Voice of America ( VOA), ayer Trump se dirigiría a Pensilvania, uno de los estados clave donde han puesto especial interés ambos candidatos, y donde tenía previsto acudir a mítines en Allentown, Litiz y Martinsburg. El presidente tenía proyectado asimismo ir a Michigan y Wisconsin, así como a Nebraska, Arizona y Nevada.
Biden, por su parte, tenía previsto quedarse el lunes en Delaware y viajar hoy martes a Georgia, con paradas en Atlanta y en Warm Springs.
Aunque Biden muestra una sólida ventaja en las encuestas de opinión, la campaña presidencial en los estados “pendulares” o “bisagra” como Florida o Pensilvania podrían acabar decidiendo el resultado final.
Según datos del U.S. Elections Project de la Universidad de Florida , más de 59.1 millones de estadounidenses ya emitieron su voto de manera presencial o por correo, un ritmo que de mantenerse podría llevar a la participación más alta en más de un siglo en el país.
EL COVID-19 AL ACECHO
La campaña estadounidense ha estado marcada por la sombra del nuevo coronavirus. De hecho, el aumento de los casos y el brote detectado en el equipo del vicepresidente Mike Pence ha ocupado la atención de la campaña en las últimas horas y ha profundizado las diferencias entre ambos candidatos sobre cómo afrontar la crisis.
La campaña de Biden sigue exhortando a que se cumplan los lineamientos de los expertos, como el uso de las mascarillas y mantener el distanciamiento social.
Trump por su lado insistió el domingo en un mitin en Nuevo Hampshire en que “no hay ninguna nación en el mundo que se haya recuperado como nosotros”. Muchos de sus partidarios en el evento no llevaban mascarillas.
El jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, dijo incluso el domingo que el gobierno estadounidense “no iba a controlar la pandemia”, y que en su lugar se estaban centrando en las vacunas y la terapéutica.