A juicio acusados de tráfico de droga
El juez determinó que existen varios indicios de que los acusados importaban droga para comercializarla. Por ello, el proceso pasa a juicio.
Cuatro personas acusadas de importar droga desde Holanda a través de Correos de El Salvador enfrentarán juicio. Así lo declaró ayer el Juzgado de Instrucción de San Salvador, tras la resolución de la audiencia preliminar.
La Fiscalía General de la República (FGR) acusa a Carlos Antonio Melara, de 32 años; Héctor Ernesto Mata, de 42; Alejandro Nuila Ferri, de 26; y Guillermo Alejandro Jiménez, de 29, por tráfico ilícito, por, presuntamente haber fingido correspondencia desde Ámsterdam para importar éxtasis.
En la resolución de la etapa de investigación realizada ayer, el juez detalló que existe la posibilidad de que los acusados estuvieran importando la sustancia para luego comercializarla.
Según la tesis fiscal, en la casa de Alejandro Jiménez encontraron una balanza, restos de marihuana y un molino para masificar la droga. Mientras que en la vivienda de Héctor Mata, varios lugares dieron alarma positiva de droga y los fiscales hallaron además un arma, de la cual no portaba permiso, y una considerable cantidad de dinero.
En el caso de otro de los implicados, el juez aclaró que no encontraron evidencias en la vivienda, pero la FGR le confiscó abundantes dispositivos electrónicos que lo vinculan con el comercio de droga.
El juez estableció que el proceso seguirá a juicio y que tres de ellos deberán enfrentarlo bajo detención. En el caso del cuarto implicado, Antonio Melara, lo seguirá con medidas sustitutivas por problemas de salud mental.
Los indicios comenzaron el 20 de enero de 2020, cuando la oficina de Correos de El Salvador alertó a la División Antinarcóticos de la Policía Nacional Civil (PNC) por 19 sobres sospechosos sin identificación del remitente. Estos únicamente estaban identificados por los nombres de cuatro salvadoreños que los recibirían.
La oficina de Correos en San Salvador volvió a recibir correspondencia sospechosa el siguiente día, 21 de enero, por lo que alertó de nuevo a la Policía. Los agentes llegaron otra vez para llevarse los paquetes y resguardarlos, ya que todavía no se habían presentado los supuestos destinatarios. La historia se repitió una última vez el 29 de enero.
Los sobres tenían una tarjeta navideña, una bolsa plateada de tabletas moradas, con el logotipo de un equipo de fútbol de Cataluña, España.