POLICÍA QUE ATENTÓ CONTRA SU VIDA MURIÓ EN EL HOSPITAL
La cifra de suicidios de policías asciende a nueve, desde noviembre de 2020 hasta ayer.
Un cabo de la Policía Nacional Civil (PNC) identificado como Jorge Alberto Renderos
murió ayer por la tarde, luego que se disparara en la cabeza con su arma mientras permanecía en su lugar de trabajo.
El hecho ocurrió en una oficina policial de Ilopango. Renderos quedó vivo y murió tras ser trasladado a un centro de atención.
Según información de fuentes policiales, el agente acababa de salir de una separación familiar y resentía el abandono de sus dos hijos. La fuente agregó que también acumulaba mucho estrés laboral y que recientemente había tenido que superar dos operaciones, lo que le habría generado problemas y le llevó al punto de tomar la decisión de atentar contra su propia vida.
La situación de los agentes ha sido denunciada en redes sociales en varias ocasiones por el Movimiento de Trabajadores de la Policía (MTP).
Como consecuencia de la situación que viven los agentes, el MTP se pronunció a través de su cuenta de Twitter y exigió al director de la PNC, Mauricio Arriaza Chicas, que atienda la situación de los elementos policiales, con base en algunas consideraciones hacia los mismos.
“Ante las consecuencias del estrés policial es urgente que el Director de la PNC haga las gestiones pertinentes para atender la situación de los miembros policiales”, decía la exigencia en la cuenta oficial del movimimento.
También pidió a las autoridades que modifiquen los “roles esclavistas” y aseguren atención psicológica efectiva para todos los policías.