“Lo único que pido es ayuda para reparar el techo”
Doña Ana R. vende cestas, pero lo que gana no le alcanza para la obra.
Ana María Raymundo, tiene 91 años, y reside en la calle principal del municipio de San Pedro Perulapán, en Cuscatlán. A pesar de su avanzada edad, se gana la vida vendiendo diferentes tipos de cestas, a un costado de un establecimiento de venta de café, en el centro de San Salvador, hacia donde viaja todos los días.
Hace algunos meses fue captada con su venta en este lugar, y a través de redes sociales se viralizaron las imagenes. Al conocer su historia algunas personas le colaboraron con alimentos, pero ahora a doña María le preocupa el mal estado de su vivienda.
Le angustia que el techo de su casa ceda ante un fuerte viento, ya que este está bastante deteriorado y necesita cambiarlo, pero no puede costearlo ya que lo poco que gana con su venta lo invierte en sus necesidades personales.
“Lo único que le pido a la gente de buen corazón es que me ayude a reparar el techo de mi casa porque las láminas que tiene están bastante viejas. También quisera poner un pasamanor en las gradas, porque mi casa está en alto, y me da miedo caerme”, expresó la anciana.
Doña María tiene el apoyo, en cuanto al cuido, de una de sus hijas, quien es la que se encarga de que la comida no le falte, sin embargo, afirma que por diferentes situaciones su hija no puede ayudarle económicamente. La anciana afirma que desde su juventud le ha gustado ser independiente y ganarse su sustento diario por lo que no le pesa salir a diario a vender. Las cestas que comercializa las compra en un mercado de San Salvador.
Cuenta que se levanta a las 5 de la mañana, se prepara y desayuna para salir de su casa hacia San Salvador, a las 6:30 a.m.
Si desea ayudar a doña Ana puede comunicarse al teléfono 7392-3138 con su Carmen Fuentes.