La Prensa Grafica

Entierran a pastor asesinado en Apopa

La policía también reportó ayer el hallazgo del cadáver de un hombre con impactos de bala en el municipio de Ciudad Delgado.

- Jorge Carbajal/michelle Recinos judicial@laprensagr­afica.com HALLAN CADÁVER

“Él ya está gozando con el Señor. El que vive en paz, también muere en paz”. Salvador Chávez, PASTOR IGLESIA ELIM

“Siempre te amaré, te nos adelantast­e querido hermano”. Any del Carmen, HERMANA DE VÍCTIMA

yer por la tarde fue sepultado el pastor de la iglesia Elim, filial Apopa, Ricardo de Jesús Mejía Alfaro, que fue asesinado el miércoles pasado por supuestos pandillero­s que operan en ese sector de San Salvador.

Un medio centenar de personas acompañaro­n al féretro que fue conducido en una carroza desde la colonia Ermita, hasta un cementerio privado del municipio de Cuscatanci­ngo.

Mejía Alfaro era miembro de una familia de seis hermanos. Según su hermano menor, Sebastián Mejía Alfaro, los recuerdos que le han venido a la mente en las últimas horas han sido los días de la Ofensiva Final de la guerrilla de El Salvador, hecho suscitado en 1989.

“Mi mamá nos ponía un colchón encima por si disparaban y dormíamos debajo de las camas. Mi mamá lo protegía mucho a él”, comentó Sebastián.

Su único hermano varón le llamaba Richard, de cariño.

Parte de la congregaci­ón de Apopa se reunió en la sede de la colonia Ermita de Apopa, lugar en el que fue velado el jueves pasado. El pastor general de la Iglesia, Mario Vega, llegó al lugar para acompañar.

ALa familia y congregaci­ón dicen no saber si ha habido alguna captura, ya que como religiosos todo de lo dejan a Dios: “Él ya está gozando con el Señor. El que vive en paz, también muere en paz”, dijo el pastor Salvador Chávez, quien llevó el mensaje antes de ser sepultado.

El pastor asesinado había sido ungido como nuevo guía de la iglesia Elim en diciembre de 2020. Su ordenación y nuevo cargo duró poco, pero para sus hermanos de congregaci­ón “ya descansa en paz”.

Any del Carmen, Isabel, Sandra, Iris y Sebastián fueron los hermanos de Mejía Alfaro aquí en la tierra. Con la lectura del Salmo 23 y varios coros fue despedido el pastor de la iglesia Elim, una víctima más del repunte de homicidios que vivió El Salvador en los últimos días de marzo.

El día en que mataron al religioso , también hubo otros ocho homicidios en el país, según cifras de la Policía Nacional Civil (PNC).

“Siempre te amaré, te nos adelantast­e querido hermano”, dijo su hermana de sangre, de familia, Any del Carmen y lanzó una flor sobre el ataúd del pastor.

Investigad­ores de la Policía encontraro­n el cadáver de un hombre entre 25 y 30 años de edad en Ciudad Delgado, en el departamen­to de San Salvador. El hallazgo ocurrió ayer por la mañana, sobre el kilómetro 16 de la carretera Este-oeste (conocida como Carretera de Oro).

El cadáver presentaba varios impactos de bala y, de acuerdo con un investigad­or de la PNC, tenía tatuajes alusivos a pandillas, sin embargo, las autoridade­s no brindaron más informació­n sobre el caso.

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Despedida. El pastor Ricardo de Jesús Mejía Alfaro fue sepultado ayer en compañía de familiares, amigos y miembros de la congregaci­ón.

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