El Sevilla no tuvo opción
El Manchester City se paseó en el Sánchez Pizjuán, con un Haaland en plan grande.
El delantero noruego Erling Haaland, con dos goles, lideró la contundente victoria (0-4) del Manchester City en su estreno en la presente edición de la Liga de Campeones, en el que fue netamente superior en el estadio Ramón Sánchez-pizjuán a un Sevilla que sigue perdido y que prolonga su desorientación de Laliga al máximo torneo continental.
El equipo de Pep Guardiola controló el partido siempre y con una aparente facilidad lo maduró para que fueran cayendo los goles en su saco y ante la desesperación de su rival y más de la afición sevillista, que estalló en críticas cuando entró el cuarto tanto en la prolongación del choque.
Fue una prueba de máxima exigencia para un equipo, el de Julen Lopetegui, que ha iniciado la temporada con un sorprendente punto de doce posibles en Laliga y con ocho goles en contra cuando en la pasada campaña fue el que menos encajó del campeonato.
Se ha notado hasta ahora las ausencias de sus dos centrales indiscutibles, el francés Jules Koundé y el brasileño Diego Carlos, y en esta ocasión el técnico guipuzcoano hizo debutar como titular en el centro de la defensa al joven canterano José ngel Carmona, que hizo pareja con otro muy joven como el galo Tanguy Nianzou y con la ayuda del serbio Nemanja Gudelj.
Todo ello como un recurso para parar al delantero de moda del fútbol europeo, el noruego Erling Haaland, quien tenía ya un gran recuerdo del estadio sevillista cuando hace dos temporadas estaba en Borussia Dortmund alemán y fue el artífice de la eliminación en los octavos de la Champions del equipo español.
El Sevilla se rindió ante la evidente superioridad del conjunto de Pep Guardiola, que sentenció con un doblete de Erling Haaland y sendos tantos de Phil Foden y Ruben Dias.
Tras un primer tiempo de pleno dominio del City, que se adelantó a los 20 minutos por medio de Haaland a a pase del belga De Bruyne, el Sevilla buscó la reacción en la reanudación, más por orgullo que otra cosa, pero se vio impotente ante el 0-2 de Foden, en el 58, con un nuevo gol del noruego, en el 67, y otro de Dias en el tiempo añadido entre la decepción de una afición local que despidió con pitos a su equipo.