ESPACIOS CIUDADANOS
@prensagrafica
Una de las mejores cosas que podemos destacar del desarrollo que ha tenido nuestra sociedad en los últimos cuarenta años es la abundancia de espacios que los ciudadanos tenemos en los diversos medios de comunicación para conocer sobre las diferentes iniciativas que se están desarrollando tanto en el sector público como en el sector privado, así como para reconocer o reclamar la forma en que los funcionarios están atendiendo la problemática que tienen que resolver en el país y en sus respectivas comunidades.
Durante todo el día los medios de comunicación dedican gran cantidad de espacios para que los ciudadanos conozcamos, aprendamos y participemos en los diversos temas que se están tratando, y también conozcamos y juzguemos la calidad de los funcionarios encargados de servirnos.
Los salvadoreños debemos sentirnos orgullosos al constatar en esos espacios el vasto conocimiento, capacidad, experiencia y dominio que ciudadanos y profesionales de todos los rincones del país tienen sobre los diferentes problemas que enfrentamos, así como las obras y trabajo que realizan cantidad de instituciones del sector privado dedicadas a ofrecer servicios a la comunidad que complementan la labor que se hace en las instituciones públicas. Desafortunadamente también tenemos que lamentar el desperdicio de las energías de tantos ciudadanos y funcionarios que ocupan los espacios para insultar, descalificar y desconocer a los que tienen una opinión diferente. Da tristeza comprobar el deterioro de muchos de los valores cívicos y morales que se deben cultivar en la sociedad, y más triste aun es que eso provenga de las actitudes y mensajes que transmiten toda clase de funcionarios y representantes electos por el voto popular. Mucha razón tenía hace algunos meses el rector de la UCA cuando en el discurso que pronunciaba en un acto de graduación se lamentaba que algunos de esos habían pasado por esa casa de estudios.
Las exigencias ciudadanas que se manifiestan en los diversos espacios de opinión deben servir para que tengamos una mejor calidad de funcionarios, funcionarios que asuman, entiendan y cumplan mejor su compromiso con la población y, sobre todo, su responsabilidad de rendir cuentas sobre su gestión ya que han sido delegados por el pueblo para atender sus necesidades, resolver las problemáticas que los aquejan, las cuales demostraron conocer y entender cuando presentaron sus ofertas electorales. Las autoridades podrán abusar de su poder instruyendo el bloqueo o imponiendo restricciones indebidas al derecho a la información pública, pero no podrán bloquear el conocimiento y el juicio que el ciudadano “de a pie” tiene sobre la forma en que los funcionarios los están atendiendo y resolviendo sus problema.
Las redes sociales han entregado a los ciudadanos un valioso recurso para que expresen sus opiniones para reconocer o denunciar la calidad de las actuaciones de los funcionarios y las obras o servicios públicos realizados o proporcionados. Es la mejor auditoría que podemos tener en la sociedad y responde con una agilidad extraordinaria, como lo pudimos ver la semana pasada con las denuncias que hubo sobre las deficiencias que se observaron con la inundación en el recién inaugurado paso a dos niveles en el redondel Utila. Es un recurso que los medios han aprovechado muy bien para interactuar y empoderar al ciudadano.
Se nota el esfuerzo que los medios de comunicación están haciendo para hacer un balance entre los espacios que otorgan a los funcionarios, los que prestan a representantes de los partidos políticos y la sociedad civil. Conocen sus audiencias, hacen sus mediciones y conocen muy bien que su profesionalismo, su credibilidad y su objetividad es el principal recurso que tienen que cuidar. Por otra parte, los buenos funcionarios deben agradecer y reconocer el valor que tienen estos espacios porque es donde nutren su conocimiento de los problemas y las necesidades de las comunidades que necesitan para realizar su gestión.
Los gobernantes han desperdiciado el talento de tantos intelectuales que el país ha tenido a lo largo de la historia. Esperemos que este mes dedicado a recordar las luchas que hemos realizado a lo largo de nuestra historia independiente sirva para reconocer los aportes que nuestra sociedad ha recibido de tantos hombres y mujeres para mejorar nuestro país.
También tenemos que lamentar el desperdicio de las energías de tantos ciudadanos y funcionarios que ocupan los espacios para insultar, descalificar y desconocer a los que tienen una opinión diferente.