BAJAR FONDOS PARA RECOMPRA DE BONOS ES UNA “MALA SEÑAL”
SEGÚN ANALISTAS REDUCIR LOS $200 MILLONES A LOS FONDOS QUE SE HABÍAN PROMETIDO PARA LA COMPRA ANTICIPADA ES UNA MALA SEÑAL PARA LOS MERCADOS. EL EJEMPLO DE ESTA SEÑAL ES QUE EL EMBI SUBIÓ EL LUNES Y LOS BONOS CERRARON AYER EN ROJO.
El Indicador de Riesgo País o Indicador de Bonos de Mercados Emergentes (EMBI) subió nuevamente ayer, a pesar del anuncio que hizo el presidente de la República, con los detalles de la compra anticipada de los bonos 2023 y 2025. Mientras, el precio de los bonos bajó. ¿Porqué? Para los analistas, la disminución en los fondos destinados para esta maniobra financiera es una mala señal para los mercados.
El 26 de julio pasado el Gobierno anunció que tenía los fondos disponibles para comprar toda la deuda externa (2023 y 2025). Ese monto, suma $1,600 millones; pero, después explicó que lo iban a hacer a precio de mercado. Es decir, pagar al precio que se cotiza cada papel de deuda; este precio varía diariamente dependiendo las expectativas que tienen el mercado (los inversionistas de deuda) sobre el país.
A precio de mercado, un día después del anuncio, el 100 % de esa deuda valía $1,100 millones. El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya señaló que la disponibilidad para hacer la compra anticipada “voluntaria y pública” eran de $560 millones.
Ese lunes que el presidente Bukele tuiteó el comunicado, que había sido liberado una hora antes, los fondos para la maniobra de compra anticipada, habían bajado en $200 millones. El país solo puede comprar los bonos ofertados hasta por un monto máximo de $360 millones.
“El mercado entiende que no tienen (dinero)... que los otros $200 millones fueron reorientados para otros fines y obviamente da una mala señal; da una señal encontrada para los mercados financieros internacionales”, dijo ayer el expresidente del Banco Central de Reserva y presidente de FUDECEN, Óscar Cabrera.
El economista explica que no es usual la recompra de un bono cuando los niveles de deuda son elevados, como el caso salvadoreño donde ronda el 84 % del PIB. Tampoco es usual cuando no se tiene un respaldo financiero atrás que apoye esa recompra.
“Hay una posición que plantea que puede ser benéfico dada la caída del precio de los bonos en los mercados financieros, dada una clasificación de bono basura (del país con la nota más baja de la región) y un EMBI de un 24 %. Pero, hay otra posición, que dice que esa recompra de bonos indica una alta probabilidad de no pago, así lo ven así muchos inversionistas también las agencias calificadoras de riesgo”, agregó Cabrera.
Una de las agencias que se ha pronunciado sobre esta medida y lo ve así es Moody's, que califica al país en Caa3 y que considera la maniobra financiera como un “incumplimiento”.
“El gobierno anunció recientemente
su intención de recomprar una parte de los bonos de 2023 y los bonos de enero de 2025 en lugar de que renovarlos como resultado de su incapacidad para acceder a los mercados a costos de financiamiento favorables. La operación de recompra busca comprar los bonos a precios de mercado, por debajo de la par, y probablemente constituya un intercambio en dificultades (es decir, un incumplimiento según nuestra definición)”, reza el último informe de la calificadora.
Para Cabrera, el saldo final de esa maniobra aún no se sabe. “Va a depender si el GOES tiene la capacidad de concretar el acuerdo SAF con el FMI; no es el más afortunado recomprar bono en un entorno donde las negociaciones con el FMI están estancadas. Es claro que este proceso tiene su riesgo”, señaló.
LIQUIDEZ
Una de las mayores presiones después de la compra anticipada, que se sabrá cuánto se ofertó hasta que el gobierno lo haga público; va a ser obtener los fondos para pagar el restante.
“Desde un punto de vista fiscal, asignar una mayor proporción de los fondos a las NOTASV2025 generaría mayores ahorros debido a los bajos precios, pero centrarse en los EUROSV2023 tiene más sentido para la gestión de liquidez. Dependiendo de cómo se asignen los fondos, El Salvador podría retirar entre el 22 % y el 37 % del total en circulación (de esa deuda)”, reza un análisis del Grupo EMFI.
Es decir, tendría que pagar el restante 88 % a 63 % de la deuda, al 100% del precio. Sin acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y sin acceso a los mercados internacionales de bonos (por las altas tasas) “las opciones son bien limitadas”, dice la economista, Rubenia Castro. “Las opciones de endeudamiento son reducidas, por eso está proponiendo la recompra porque son las últimas cartas que tendría dentro del abanico de opciones”, agrega.
“¿Cuáles eran los instrumentos que habían venido usando los diferentes gobiernos? préstamos externos; el FMI en base al desempeño financiero ha otorgado préstamos de libre disponibilidad, de apoyo presupuestario, préstamos contingentes; pero el gobierno todo eso ya lo usó y no tiene apertura
“Las opciones de endeudamiento son reducidas, por eso está proponiendo la recompra porque son las últimas cartas que tendría dentro del abanico de opciones”.
con esas instituciones. Luego está la emisión de eurobonos, pero el mercado está cerrado a comprar deuda al país por la misma incertidumbre; y al interior, los fondos de pensiones, casi que todo está invertido en deuda emitida por el gobierno, los bancos también han prestado, las opciones bien limitadas”, explica.
Los bancos de inversión consideran que independientemente de los resultados de la maniobra financiera, los “los desafíos macroeconómicos que enfrenta el país persistirán”.
“Si se adopta un plan macroeconómico que establezca objetivos fiscales y monetarios claros. Esto podría contribuir a la recuperación del valor de mercado de los bonos soberanos”, recalca Torino Investments.
Óscar Cabrera, PRESIDENTE FUDECEN.
Rubenia Castro, ECONOMISTA. “El mercado entiende que no tienen (dinero)... que los otros $200 millones fueron reorientados para otros fines y obviamente da una mala señal; da una señal encontrada”.