EXHUMAN CADÁVER DE REO QUE MURIÓ EN RÉGIMEN
os restos mortales de Rafael López Castellón, originario de Jucuapa, Usulután, y quien murió tras estar recluido en el Penal La Esperanza (Mariona), por fin llegaron ayer a su casa, luego que fue enterrado en el cementerio La Bermeja de
San Salvador en junio sin que Centros Penales informara a su familia.
López Castellon tenía 53 años cuando fue detenido en el marco del régimen de excepción en su vivienda del cantón Llano de la Cruz de la ciudad Jucuapense. Su deceso fue conocido por un hermano el 8 de agosto, cuando solicitaba los antecedentes penales de Rafael. Entonces fue que le dijeron que él murió el 1 de junio y que había sido enterrado el 22 del mismo mes. Su familia no lo sabía.
Antes de que su cuerpo llegara a la que fue su casa se tuvo que hacer un proceso de exhumación, pues su cadáver estaba has
Lta ayer por la mañana en un cementerio capitalino. “Se había citado a las 10:00 a.m. Pero se empezó un poco después, a las 12:00 (mediodía) ya lo habían sacado. Al fin se logró sacarlo de la fosa común para poderlo enterrar aquí cerca de nosotros, que quede en su lugar, donde vivió” dijo Pedro Castellón, hermano de Rafael.
La familia tuvo que esperar más de un mes desde que se conoció su deceso para poderlo enterrar. En ese lapso de tiempo sus hermanos solicitaron a la Fiscalía General de la República (FGR) que el proceso se agilizara y así poder dar cristiana sepultura a su pariente.
Pedro considera que la captura del ahora fallecido fue una injusticia porque “a mi hermano lo agarraron trabajando en su molino. Se le suplicó a la policía que no se lo llevarán y hasta me amenazaron de llevarme. Es una injusticia porque cinco meses después lo recibimos en una caja sellada y desecho”.
El reo fallecido fue capturado la tarde del 8 de abril por el delito de agrupaciones ilícitas y murió el 1 de junio por complicaciones de circulación en el Hospital Zacamil de San Salvador, donde estuvo ingresado desde el 17 de mayo. Fue enterrado 20 días después de su deceso.
La familia dijo que ya están recibiendo apoyo de organizaciones defensoras de derechos humanos para obtener justicia y reparación por lo sucedido: “Ya que todo se dio por culpa del gobierno, entonces ellos nos tienen que responder”.