Informalidad y bajo crecimiento mantienen pobreza
En 2022, la inflación de Honduras ha crecido aceleradamente.
La pobreza en Honduras, que afecta al 74 % de sus 9.5 millones de habitantes, es consecuencia de los altos niveles de informalidad y un crecimiento económico no sostenible debido al fuerte incremento de la deuda y la corrupción, señala un estudio publicado ayer, en Tegucigalpa.
"La informalidad y la falta de empleos de calidad y bien pagados son dos factores principales que no contribuyen a mejorar los índices de pobreza", señala el estudio "Situación de la Economía y Finanzas de Honduras", presentado por la ONG Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ).
En la última década, Honduras ha sido el país de Centroamérica "con un mayor porcentaje de empleo informal con relación al empleo total", pues en 2020 el 81.4 % de los hondureños estaba en condiciones de desempleo o subempleo, dijo el investigador senior de ASJ, Édgar Aguilar.
La ASJ, capítulo hondureño de Transparencia Internacional, destaca que dentro de la población empleada "hay una alta informalidad persistente en todos los sectores, asociada con la subutilización de la mano de obra (subempleo) y la baja productividad e ingresos laborales". El estudio afirma que además del "débil Estado de derecho" que ha caracterizado a Honduras en la última década, la pandemia de la covid-19, los huracanes Eta e Iota y el contexto internacional han "deteriorado aún más las condiciones y perspectivas para la economía y finanzas del país".
En 2022, Honduras ha reportado un crecimiento acelerado de la inflación, de la que el 40 % es importada principalmente por el aumento en el precio de los combustibles, insumos de producción como fertilizantes y plaguicidas, y alimentos importados, añadió.
Honduras también es el país centroamericano que “más deja de recaudar impuestos” por exoneraciones y concesiones fiscales, privilegios que normalmente “son justificados con el argumento de que aumentarán la cantidad y calidad de empleos para los hondureños”, pero los puestos de trabajo “siguen siendo en gran parte precarios y la pobreza alta”.