¿ENTIENDE ALEMANIA QUE EN UCRANIA SE PELEA LA GUERRA EN EUROPA?
Hace
años
La guerra en Ucrania se encuentra en una especie de pausa, en preparativo para una gran ofensiva rusa, llamaron a 300 mil reclutas con no tanto fervor patrio, planean llamar a otros 200 mil en cualquier combinación con los grupos mercenarios que han peleado con Rusia desde el principio.
Ucrania y sus asesores militares occidentales consideran crucial el mayor apoyo de Occidente en armas, de las que ya han provisto misiles, drones, javelins de ataque a distancia, armas de combate directo, especialmente tanques. La mayoría de países europeos apoya, Alemania una vez más titubea, lo más necesitados son los tanques alemanes Leopardo, de los cuales hay unos 2,000 en armamentos de 13 países europeos, mientras que en la “Bundeswehr”, las fuerzas armadas de la República alemana, hay aproximadamente 350 únicamente. Debido a un Tratado posterior a la Segunda Guerra Mundial, los países solamente pueden utilizar armamento fabricado en otro país para el ataque a un tercero, con la aprobación del país que lo fabrica, y Alemania nuevamente titubea, pone excusas diferentes cada vez, pero se abstiene, un sinsentido que puede romperse.
Algunos países fronterizos con Rusia más temerosos de un ataque ya están entrenando a equipos ucranianos en el uso del Leopardo y unos han declarado que en última instancia soltarían los tanques sin la autorización de Alemania. El ambiente diplomático hacia Alemania de parte de sus aliados es duro, los confrontan directamente, pero ellos escapan, se deslizan sin enfrentarlo.
En vez de eso Boris Pistorius, ministro de Defensa alemán, declaró que como no ha habido consenso en los Leopardos no se ha tomado ninguna decisión. Y no es que Alemania no haya ayudado mucho a
Ucrania, es el segundo en apoyo después de EUA, 3.3 billones de dólares. Los otros amigos de Ucrania han respondido generosamente, no por solidaridad solamente, ellos comprenden que lo que se está peleando es la guerra de Europa.
El fallo de proveer los Leopardos en este momento pudiera ser solo un factor menor en la guerra, aun así
Alemania sale gravemente dañado en su reputación con sus aliados y el resto del mundo occidental. Pistorius declara que mientras tanto los demás pueden avanzar en entrenar a los ucranianos en el uso de los Leopardos. Una y otra vez el primer ministro Scholtz ha defendido que no puede enviar cierto tipo de arma para eventualmente ceder, miles de vidas ucranianas perdidas por la indecisión.
La urgencia por recibir los Leopard 2 –uno de los modelos de tanque más ágiles y modernos y considerado el mejor para Ucrania, tanto por la orografía del país como por elementos de logística, al ser de fabricación europea– aumenta, según ha recalcado el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Quizá no cambien el sentido de la guerra, pero se consideran cruciales para la batalla de Donbás (este de Ucrania), que está siendo extremadamente sangrienta, para que Kiev empuje a las tropas del Kremlin y logre recuperar terreno, y de cara a la nueva ofensiva cuando el frío del invierno afloje. Además, el simple hecho de que Alemania autorice su envío ya es un mensaje para Rusia.
Rusia observa con satisfacción los debates internos y divergencias en la UE y la OTAN sobre la entrega de los Leopard. El Kremlin ha asegurado que la presión a Alemania muestra el “nerviosismo” entre los aliados y advierte sobre las consecuencias del envío de Leopard 2. “El pueblo ucraniano tendrá que pagar por todo ese pseudoapoyo”, ha dicho Peskov, citado por la agencia estatal rusa Tass.
El ambiente diplomático hacia Alemania de parte de sus aliados es duro, los confrontan directamente, pero ellos escapan, se deslizan sin enfrentarlo.