“Las Pericas” llegan al Teatro Chaplin
Las funciones de esta exitosa puesta de escena de Alboroto Teatro iniciaron el viernes pasado en el Teatro Chaplin de Santa Tecla. Las funciones continúan hoy y concluirán el próximo domingo 5 de febrero.
Perfecta para los amantes de las carcajadas. También para los que disfrutan del humor negro. “Las Pericas” es para los que gustan de la bufonería, de lo absurdo, lo irreal y la búsqueda de poder en cada momento. Todo esto y más sensaciones son las que reúne esta magistral obra teatral, creación del novelista y dramaturgo cubano Nicolás Dorr. Luego de su muerte en 2018, su legado teatral sigue vigente en muchos países.
Este clásico cubano, que data de 1961, presentado nuevamente por Alboroto Teatro, el grupo teatral salvadoreño que ya la ha presentado incluso fuera de nuestro país, mezcla la libre imaginación y la farsa.
“Las Pericas”, considerada la obra más destacada de Dorr, cobra vida en El Salvador gracias a las destacadas actuaciones de actores de trayectoria: Isabel Campos, Alejandro Alfaro, Marvin Pleitez y Luis Antonio Fuentes, quien también es el director de este montaje que desde el viernes se presenta en el referido teatro tecleño.
“En nuestra propuesta se recurrirá a una de las formas del Teatro que se usaba en Grecia y en el teatro Isabelino, utilizar al hombre para representar a una mujer y no precisamente por temas de género, sino porque, como lo plantea el Dramaturgo, estas tres mujeres poseen tal fuerza escénica que se necesita de la mezcla de la energía masculina y femenina para interpretar a las 'viejas' tal como Dorr lo propone”, detalla Alboroto Teatro.
En “Las Pericas”, también deja ver pinceladas del “adolescente tímido y delgaducho, de aspecto retraído, casi un
niño realmente, indeciso, que intuía claramente en el berenjenal escénico en que se había metido”, como es descrito el cubano por el crítico y ensayista Matías Montes Huidobro.
Según Alboroto Teatro, “como propuesta estética se recurrirá al Teatro del Esperpento, dicha estética mezclará las técnicas de la farsa y el absurdo para contar temas de ejes transversales como: las familias disfuncionales, el sometimiento de una mujer hacia otra mujer y la lucha de poderes”.
La obra está ambientada en 1961, en algún barrio medio-alto del gran San Salvador, vestuario de la época y con recursos estilísticos en el “attrezzo” que transportan a la Cuba de ese tiempo.
Entre los planes Alboroto Teatro están: una gira por el país, visitar Centroamérica y participar en festivales.