Imputan a joven que filtró los documentos
El Pentágono considera la filtración de los documentos secretos como un “acto criminal deliberado”.
ack Teixeira, el joven señalado de estar detrás de una de las mayores filtraciones de documentos del Pentágono en la última década, fue imputado ayer por delitos de transmisión de información de defensa nacional y extracción de información clasificada.
El joven de 21 años compareció ayer por la mañana ante el juez magistrado de la Corte Distrital de Massachusetts, David Hennessy, que leyó los cargos en su contra, recogieron medios nacionales.
La cadena de televisión CNN, que citó fuentes de la Oficina del Fiscal General en Boston, indicó que a Teixeira, de 21 años, se le leyeron los cargos por los que es procesado, que aún se desconocen y de cuya inocencia o culpabilidad deberá pronunciarse.
El fiscal general estadounidense, Merrick Garland, aseguró el jueves, tras la detención del joven, que las acusaciones están relacionadas con la “presunta sustracción, retención y transmisión no autorizadas de información clasificada relativa a la defensa nacional”.
La policía federal (FBI) detuvo en la localidad de North Dighton (Massachusetts) a Teixeira, supuesto autor de las filtraciones de documentos secretos, sobre todo relacionados con la guerra de Ucrania, que han sacudido a Estados Unidos en los
Júltimos días y que podrían ser las más graves en una década.
Las autoridades no han revelado detalles sobre cómo se produjeron las filtraciones, pero varios medios han informado de que Teixeira publicó los documentos secretos que obtenía en la base de la Guardia Nacional en la que trabajaba porque quería impresionar a otros jóvenes con los que se comunicaba a través de una plataforma de internet Discord popular entre aficionados a los videojuegos. abandonó ayer la cueva en la que permaneció sola por 500 días a 70 metros de profundidad, sin poder averiguar el paso del tiempo, un desafío que definió como “excelente e insuperable”.
A veces aturdida y siempre sonriente, Flamini compareció, sin gafas de sol, ante la prensa poco después para relatar este desafío, ya convertido en récord mundial, que le ha regalado momentos “difíciles y muy bonitos” durante más de dieciséis meses, en los que nunca encontró la forma de averiguar el transcurso de los días.
La deportista reconoció que durante el tiempo que estuvo bajo tierra vivió momentos complicados como una invasión de moscas o alucinaciones auditivas, pero que el “truco” para afrontar situaciones extremas está en centrarse “en el aquí y en el ahora”.
Sin conocer aún lo ocurrido en el mundo durante este tiempo —“estoy anclada en el 21 de noviembre de 2021”, fecha en la que entró— dijo que nunca pensó en abandonar.