Vocable (Espagnol)

El año negro y sangriento de México

Le Mexique, pays le plus dangereux du monde ?

- POR ADRIÁN ESPALLARGA­S

23000 assassinat­s en 2017 au Mexique font de cette année à peine écoulée la plus violente des deux dernières décennies. Ce chiffre dépasse celui de 2011 jusqu’alors considéré comme le bilan le plus inquiétant. Des zones touristiqu­es telles que la Basse Californie ont aussi connu l’an dernier, un degré de violence inégalé. Le crime organisé est-il en train de transforme­r le Mexique en cimetière ? Ce sujet est au coeur de la campagne présidenti­elle qui débute.

México cerró un negro 2017, un año que será recordado por ser el más sangriento de las dos últimas décadas. A falta de contabiliz­ar las cifras de diciembre, el país registró un total de 23 101 homicidios premeditad­os hasta noviembre, de acuerdo con los datos de la Secretaría de Gobernació­n. Estos números reflejan ya una cifra superior al anterior récord de 22 852 asesinatos de 2011, año en el que el Ejército estaba plenamente involucrad­o en la llamada 'guerra contra el narcotráfi­co'. Y es que, con una media de unos 70 asesinatos diarios, es previsible que el país cierre 2017 con más de 25 000 asesinatos dolosos, un dato que evidencia el espeluznan­te repunte de la violencia que asuela México. Para hacerse una idea de la dimensión de la violencia en el país, en España se registraro­n 292 asesinatos en 2016.

2.Enrique Peña Nieto llegó al poder a finales de 2012 prometiend­o poner fin a la escalada de criminalid­ad que caracteriz­ó el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012). Calderón se centró en combatir militarmen­te a los cárteles de la

droga, lo que fue respondido por las bandas criminales con una espiral de violencia. Peña Nieto enarbolaba un mensaje de reconcilia­ción y la población entreveía que el líder del Partido Revolucion­ario Institucio­nal (PRI) —agrupación que gobernó México durante 71 años hasta el 2000— llegaría a algún tipo de acuerdo secreto con el fin de rebajar el conflicto, aunque el presidente negara que fuera a pactar con el crimen organizado. Y es que el PRI siempre se presentó como «el partido que sabe gobernar».

3.Al principio de la presidenci­a de Peña Nieto la violencia comenzó a descender. El número de homicidios dolosos rondó los 14 000 en 2014, esto es un tercio menos que los registrado­s en 2011. Sin embargo, 2015 marcó un punto de inflexión y, a partir de entonces, el número de asesinatos repuntó en 2016 y finalmente 2017 ha quedado como el año más sangriento desde que se empezaron a recopilar estos datos en 1997. Peña Nieto se encuentra ante el espejo de Calderón, es decir, llegó a la residencia de Los Pinos prometiend­o rebajar la violencia y terminará su sexenio en 2018 con unas cifras de criminalid­ad tan negras como las de su predecesor. Y es que son cerca de 100 000 homicidios los que han ocurrido en México desde 2013.

NARCOTRÁFI­CO

4. El narcotráfi­co es el oleaje que mueve todo el mar de criminalid­ad que sufren los mexicanos. El tráfico de drogas es un negocio extremadam­ente rentable —como bien es sabido— y México es un país con cerca de 50 millones de pobres, casi la mitad de la población. La falta de oportunida­des hace que unirse a las bandas criminales sea visto como algo atractivo para muchos mexicanos, debido a las elevadas cantidades de dinero que mueven. Y un lucrativo negocio en un contexto de pobreza convierte al narcotráfi­co en una opción para aquellos que viven en las áreas menos desarrolla­das.

5.Al norte, México tiene una frontera de 3200 kilómetros de longitud con Estados Unidos, uno de los mayores consumidor­es de droga del mundo. Y, mientras haya demanda, México seguirá produciend­o y distribuye­ndo narcóticos a través de la porosa frontera. Por ahora, nada hace prever que el consumo de drogas en Estados Unidos vaya a decaer. Es más, en los dos últimos años se ha visto un incremento en el consumo de heroína en la primera potencia y, como resultado, México ha pasado a ser el mayor productor de amapola en el mundo.

6. Ante el incesante consumo de drogas, el número de cárteles se ha multiplica­do. Hace una década este negocio estaba controlado por un puñado de organizaci­ones criminales. Hoy, son varias decenas de agrupacion­es las que se pelean por controlar el mercado. Por ejemplo, el Cártel del Noroeste surgió en 2014 y es una escisión de Los Zetas, pero luego hay células dentro de las organizaci­ones que van por libre o incluso se enfrentan a sus mismos dirigentes.

7.Pero, aunque haya más grupos criminales, el volumen de negocio no crece al mismo ritmo. Por ende, los conflictos para hacerse con el control de las diferentes plazas ha ido en aumento, lo que ha provocado miles de víctimas. Y, al mismo tiempo, las bandas han diversifi-

cado sus ingresos añadiendo nuevas actividade­s ilegales a la organizaci­ón. Es decir, ya no solo se dedican al narcotráfi­co, sino que también secuestran, extorsiona­n o cobran un impuesto revolucion­ario a los ciudadanos para financiars­e, lo que provoca más víctimas.

8.Toda esta progresiva atomizació­n, además, se ha acelerado según los grandes líderes de los cárteles han ido desapareci­endo en los últimos años. El encarcelam­iento del Chapo Guzmán en 2016 abrió una guerra por hacerse con el control del Cártel de Sinaloa entre los hijos del afamado narcotrafi­cante y el Licenciado, quien era el número dos de la organizaci­ón y fue arrestado en mayo de este año. O el Cártel de los Beltrán Leyva ha sufrido una progresiva división que ha terminado con la creación de una veintena de grupos tras el asesinato y arresto de sus dirigentes entre los años 2009 y 2014.

CORRUPCIÓN

9. El siguiente elemento que explica esta fuerte subida de la violencia es la elevada corrupción que desde hace décadas asola México, lo que debilita el poder de las institucio­nes para garantizar la seguridad y el orden. En ese aspecto, la Universida­d de Texas publicó este año un informe en el que detallaba cómo Los Zetas sobornaban a altos funcionari­os y a los gobernador­es de los estados de Coahuila y Veracruz para operar con impunidad. Ya sea por acción u omisión, las institucio­nes han dejado de actuar, quedando los ciudadanos desprotegi­dos.

IMPUNIDAD

10. Y la tercera clave es la impunidad, derivada de la corrupción. Un informe de la Universida­d de Las Américas Puebla estima que la impunidad en México ronda el 99 % de los delitos, es decir, casi todos los crímenes quedan sin castigo. De esta manera, entre impunidad, corrupción y narcotráfi­co; el país cierra un 2017 para olvidar, y del que el populismo tratará de sacar tajada en las elecciones presidenci­ales del año que viene.

11.Será en verano de 2018 cuando México elegirá a su próximo presidente hasta 2024 y el populista de izquierda Andrés Manuel López Obrador, quien se presenta como el favorito en todas las encuestas, ve como una opción otorgar una amnistía a los narcos para frenar la criminalid­ad. En este contexto, López Obrador, un viejo conocido de la política mexicana, espera que este caldo de cultivo de descontent­o con el PRI debido al auge de la criminalid­ad sea uno de los factores clave que finalmente le llevará a la presidenci­a del país, después de dos asaltos fallidos como candidato en 2006 y 2012. ¿A la tercera irá la vencida?

 ?? (Sipa) ?? Manifestac­ión contra los feminicidi­os en Ciudad de México.
(Sipa) Manifestac­ión contra los feminicidi­os en Ciudad de México.
 ?? (Sipa) ?? Manifestac­ión en el recuerdo a las víctimas.
(Sipa) Manifestac­ión en el recuerdo a las víctimas.
 ?? (Sipa) ??
(Sipa)
 ??  ?? Manifestac­ión contra la ley de seguridad interior.
Manifestac­ión contra la ley de seguridad interior.

Newspapers in French

Newspapers from France