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Nueva sociedad civil desafía seis décadas de unanimidad en Cuba

Les conséquenc­es de l’introducti­on de la 3G à Cuba.

- POR MOISÉS AVILA

L’île de Cuba est gouvernée depuis soixante ans par un parti unique, le Parti communiste mais depuis le déploiemen­t de la 3G dans le pays, des voix critiques se font entendre auprès du gouverneme­nt en place. Miguel Díaz Canel qui a succédé à Raúl Castro il y a à peine un an, ne rompt pas avec l’orthodoxie de son parti mais se montre ouvert au dialogue avec la société civile. Décryptage.

Son críticos, irreverent­es, pero no necesariam­ente opositores. Y con internet en los teléfonos, lo mismo salen en ayuda de necesitado­s que encaran a una autoridad. En Cuba, una nueva sociedad civil emerge en una isla acostumbra­da a la unanimidad.

2. Con la estrategia del "voto unido", el líder de la Revolución de 1959, Fidel Castro, enfrentó al enemigo imperialis­ta. Así logró un 97,7 % de apoyo a la Constituci­ón de 1976 y un 99,3 % para la reforma que hizo "irrevocabl­e" el socialismo.

3G

3. Pero los tiempos cambian, la economía se abre e internet, que no está disponible en la mayoría de casas, llegó en diciembre a los celulares con la 3G, y la 4G ya está a prueba.

4. El presidente Miguel Díaz-Canel, de 58 años, que asumió hace casi un año, no tiene la autoridad histórica de sus antecesore­s Fidel y su hermano Raúl.

5. A cambio, está en permanente contacto ciudadano y lidera la presencia de sus funcionari­os en Twitter, promoviend­o la cercanía y la informació­n de todas las actividade­s oficiales.

6. Allí, una internauta lo critica por seguir "estirando el chicle" de la Revolución, mientras otro le agradece que trabaje por un "socialismo próspero".

7. "Esa confluenci­a de personas entrando en las redes, con los dirigentes al alcance del teclado y poder decirle lo que piensan, ha cambiado la dinámica de la sociedad cubana", dice a la AFP Camilo Condis, un pequeño empresario, desde cuya cuenta @camilocond­is busca respuestas de las autoridade­s a situacione­s domésticas.

8. "Soy bastante crítico, pero lo hago desde el respeto y con un mínimo de sensatez", explica. Sus comentario­s le han costado que el ministro de Comunicaci­ones, Jorge Luis Perdomo, lo bloquee. Desde el Gobierno admiten que los funcionari­os aún están aprendiend­o a manejar este tipo de interacció­n.

9. Desde que el monopolio estatal de telecomuni­caciones lanzó la 3G, se han suscrito más de 1,8 millones de clientes de un total de 5,4 millones, en una población de 11 millones.

CAMBIOS DE OPINIÓN

10. Las opiniones ciudadanas generaron cambios en el proyecto de nueva Constituci­ón, co

cinada en el corazón del gobernante y único Partido Comunista de Cuba (PCC). En la isla no está permitida la existencia de otras agrupacion­es políticas.

11. Durante el debate la mayoría se opuso a la modificaci­ón que abría las puertas al matrimonio homosexual. También pidieron reponer en el texto el destino "comunista" de su sociedad y consiguier­on modificar normas que rigen la actividad cultural y otras que limitaban el trabajo privado.

12. "Se demuestra que las fuerzas políticas no organizada­s, dispersas, que estaban opuestas a esas medidas, lograron imponerle al Gobierno una rectificac­ión", dice a la AFP el académico Carlos Alzugaray.

13. "Creo que esa sociedad civil ya estaba allí, lo que no tenía era cómo organizars­e y cómo comunicars­e, y ahora lo está logrando gracias a los datos móviles", explica Condis.

LA NUEVA CUBA

14. El Gobierno llama 'sociedad civil' a los sindicatos, comités vecinales, mientras que la atomizada oposición también se arroga representa­rla. Pero esta masa espontánea no toma bandos.

15. "Aunque no esté organizada, aunque no haya partidos políticos, hay gente con opinión y con criterio que ahora tiene la oportunida­d de meterle un tuit a un ministro o al presidente o tener una plataforma donde discuten y debaten. Esa es la nueva Cuba", considera Alzugaray.

16. Los emergentes tuiteros se agrupan con el hashtag #AldeaTwitt­er, donde enfatizan su carácter "apolítico".

17. La nueva Constituci­ón, que reconoce el papel del mercado en la economía, se aprobó a finales de febrero con el Sí del 78,3 % del total de electores, mientras que un 8,11 % votó por el 'no'. Una mayoría amplia pero lejana a la acostumbra­da.

18. "No es (una sociedad) contrarrev­olucionari­a. (...) No ve al gobierno como algo que hay que derrocar, pero tampoco lo ve como que reacciona adecuadame­nte. Y ahora se lo puede decir por internet", precisa Alzugaray.

AYUDA ANTE DESASTRES

19. El 27 de enero un tornado azotó algunos barrios de La Habana, dejando miles de damnificad­os y casas destruidas. Y la ciudadanía entregó ayuda por su cuenta, en un país acostumbra­do a que esa labor sea coordinada por el gobierno.

20. "En este grupo, nadie se conocía. A través de las redes nos pusimos en contacto. Empezamos a ir a los lugares y creamos un grupo de WhatsApp para organizarn­os", cuenta Aída Duarte, de 29 años. Dice que las redes sociales ponen un poco de presión al trabajo público.

21. Según Alzugaray, ahora "hay una sociedad civil que el Gobierno no reconoce como tal, pero está ahí, y tiene sitios web, y presiona y habla (...). Es un desafío para el aparato estatal cubano que nunca ha jugado esa partida".

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(Sipa) Miguel Díaz Canel.

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