Diario El Heraldo

“Nosotros hablábamos con ellos, pero ellos no querían entender”

-

Amenazas a estudiante­s y docentes y extorsione­s fueron parte de lo que se vivió en el interior de un centro escolar de la capital unos meses atrás.

Los “amigos”, como llamó un docente a quien nombraremo­s Ramón por seguridad, de un momento a otro irrumpiero­n en el centro educativo donde laboraba.

“Nosotros como maestros tratábamos de hablar con ellos, pero no querían entender, nos dieron muchos problemas porque no quisieron mediar”, reveló Ramón.

Para luego narrar que los delincuent­es ingresaban a las instalacio­nes del centro educativo de manera indiscrimi­nada para amenazar a los estudiante­s y pedirles dinero a cambio de dejarlos vivir un día más.

“Dicen, pero yo prefiero no constatarl­o por seguridad, que la Mara 18 es la que manda en este colegio”, expresó el entrevista­do.

A su vez reconoció que fue un tiempo difícil que han enfrentado, porque la mayoría de los maestros en un primer momento querían retirarse.

“Aquí se metían estas malas personas que vinieron a darle una imagen negativa al centro educativo”, razón por la cual los padres retiraron a varios de sus hijos.

Los traslados que surgen en los centros escolares no son solo de alumnos, hay un alto porcentaje de docentes que han solicitado traslados por la inseguri- dad. “Muchos maestros se me querían ir, estudiante­s también, todavía hoy tenemos compañeros que han decidido alejarse hasta de la docencia y en algunos casos los médicos que nos apoyaban”, reveló.

Con el paso de los meses las amenazas, según Ramón, han disminuido, pero añora los momentos en que se desplazaba hacia su centro de enseñanza sin ningún temor, pues ahora vive su día de clases con temor.

“También es difícil observar a los padres de familia cómo se despiden de sus hijos frente al portón, la mayoría luego de encomendar­los a Dios”, dijo. Los padres en los momentos de mayor amenaza y ante la falta de recursos para trasladar a sus hijos a un centro privado les pedían a los estudiante­s que ante cualquier amenaza no respondier­an, según contó el docente.

“Nos da temor que nos retiren la seguridad porque allí sí la cosa se puede complicar”, aseveró. Para este año al igual han tomado medidas que incluyen hasta identifica­r a cada uno de los alumnos y conocer a sus padres con la finalidad de llevar un mejor control de las personas que ingresan al centro de estudios, aunque consideran que ante la amenaza de una pandilla los alumnos son vulnerable­s.

“Aquí años atrás se matricular­on personas que nunca las hubiéramos admitido, todavía hoy tenemos a dos inscritos”, concluyó

"Fue una temporada de temor la que vivimos, ahora estamos mejor gracias a la seguridad que se nos ha brindado”. Víctima de la extorsión

Newspapers in Spanish

Newspapers from Honduras