Salud La gineco-obstetricia en Honduras
al comprobar que estamos muy lejos de los adelantos tecnológicos que garantizan el ejercicio médico efectivo para el diagnóstico, prevención y tratamiento de nuestra población femenina. Honduras siempre a la zaga.
En salud pública hacemos medicina primitiva, tradicional, de guerra, de riesgo y sin opciones ni decisiones en un sistema politizado con funcionarios convenientes no diligentes improvisando entre la mediocridad y la incapacidad.
Nuestras estadísticas de morbilidad y mortalidad materna, fetal y neonatal son preocupantes. El “no hay” y el “hasta mañana” es por incompetencia de quienes han tenido y tienen la obligación de proveer ese impostergable beneficio y que 2017 años d. C. no entienden que procurar salud es evitar las causas que la enferman. En Honduras, el derecho de nacer con dignidad se violenta con indignidad. La muerte materna no es dividendo de la crisis, sino irresponsabilidad de quienes la mantienen.
El Hospital Escuela, referente de los 28 hospitales nacionales que están en peores condiciones, es un gran centro de salud carente de casi todo como evidencia de una salud saboteada por la inoperancia. Es vestigio de lo que fue y monumento a la indiferencia gubernamen- tal. Igual, el IHSS subsiste en medio de la corrupción de conocidos políticos, empresarios y funcionarios que deben estar presos junto a otros que se lucran con el dolor del pueblo. ¿Cuánto bien haríamos a nuestras mujeres y sus hijos con lo robado por los malditos corruptos sin castigo? Estamos lejos de una salud pública como indicador de calidad de vida. La visión que nuestros gobernantes tienen de ella se reduce al reflejo de escenarios sociales donde la politizan, se mienten y nos mienten. La salud es reto de nuestra población enferma a la que debemos darnos con pasión, decisión y gestión sin precedentes. Mientras los hospitales y centros de salud están al tope de necesidades y precariedades, las autoridades hacen planes extraordinarios sin límite ni conocimiento, apresurando incertidumbre entre la verdad y la falsedad amenazando al raciocinio humano. Necedad e improbidad.
Se discutieron tecnologías que sin costo significativo son indispensables para el manejo de las complicaciones del embarazo. No tenerlas obliga a mal ejercer sin disminuir tanta muerte evitable. La SGOH está dispuesta a sugerir mejores y actuales métodos de estudio en beneficio de nuestras madres y sus hijos. En un año tendremos otro Congreso, ojalá no sigamos lamentando la abulia, incapacidad y desconocimiento de nuestras autoridades. No es justo aprender y saber para hacer cuando los que no saben ni pueden, mandan
Estamos muy lejos de los adelantos tecnológicos que garantizan el ejercicio médico efectivo para (...) nuestra población femenina”.
“Igual, el IHSS subsiste en medio de la corrupción de conocidos políticos, empresarios y funcionarios que deben estar presos”.