Emiliani llevará la palabra de Dios a todo el país
El obispo de San Pedro Sula anunció que se dedicará a impulsar las obras sociales que tenía relegadas
Luego de anunciar su renuncia al cargo de obispo auxiliar de San Pedro Sula, Rómulo Emiliani dijo ayer que ahora se dedicará a impulsar obras sociales y a llevar la palabra de Dios a todo el país.
El sacerdote confirmó el martes que el papa Francisco aceptó su renuncia al cargo como obispo auxiliar y vicario general de la diócesis.
Emiliani expresó ayer que renunció “porque ejercer un cargo de autoridad toma tanto tiempo, energía y lógicamente causa preocupaciones y angustias y te limita más tiempo y energía para trabajar por cosas que considero esenciales”.
Explicó que desde que fue ordenado sacerdote, al día siguiente, fue nombrado formador y rector del seminario claretiano para Centroamérica. “Siento que en esta última etapa pastoral de mi vida debo dedicarme a lo esencial, donde yo puedo dar más de mí, que es la parte de predicación y promoción humana. Renunciar a un cargo te permite tener mucha más libertad, tiempo y energía para poder servir mejor y eso es todo”.
Sostuvo que sigue siendo obispo, pero sin autoridad, y afirmó que fue una decisión personal que ni monseñor Ángel Garachana sabía.
Dijo que una de sus frustraciones es no haber concluido el centro penal de Naco, Cortés. “Para mí ese presidio que lo comenzamos con tanta ilusión y tendríamos que haberlo finalizado con capacidad para 2,500 internos, el penal no se ha acabado porque hace un año el gobierno decidió que no siguiéramos la obra”.
“Construíamos un presidio de acuerdo a las posibilidad económicas y nos salía por 25 millones de dólares, pero con estos nuevos planos el presidio costará más de 50 millones de dólares”. Sobre la cárcel de El Pozo expresó que “es una cárcel bien hecha, fantástica”