La Patrulla de Fronteras cobra protagonismo bajo Donald Trump
Medidas El mandatario estadounidense se prepara para contratar 5,000 nuevos agentes patrulleros que cuidarán la frontera, más jueces del servicio de inmigración y funcionarios a cargo de las deportaciones de migrantes
Una vez a la semana, los líderes sindicales de la Patrulla de Fronteras producen un programa de radio desde una oficina cerca de San Diego cuyas paredes están cubiertas con una bandera estadounidense y retratos del presidente estadounidense Donald Trump y el vicepresidente Mike Pence.
Durante una hora los agentes hablan de la seguridad de la frontera y hacen comentarios en un programa transmitido vía podcast y por una estación de radio de Tucson, Arizona.
El programa tiene un patrocinador insospechado: el portal noticioso ultraderechista Breitbart News, que no es precisamente un abanderado de las causas sindicales. Los participantes ofrecen una idea de lo que piensan hacer los líderes sindicales para reforzar la vigilancia de los 9,600 kilómetros (6,000 millas) de frontera con México y Canadá.
El programa, llamado The Green Line (“La línea verde”, por el color de los uniformes), está dirigido a los agentes, el Congreso y los medios de prensa. Es parte de un esfuerzo que ya lleva cuatro años, cuyo objetivo es darle mayor protagonismo al sindicato, una estrategia que los llevó a apoyar abiertamente la candidatura presidencial del ahora mandatario de Estados Unidos de América, Donald Trump
Reemplazo
Ese gesto tuvo su premio en noviembre. Una semana después de que Trump asumiese, el jefe de la Patrulla de Fronteras fue despedido y reemplazado por alguien cercano al sindicato para que encabece la agencia en momentos en que se apresta a incorporar mucha gente nueva.
El sindicato, liderado por un exmiembro del equipo de transición de Trump, se ha ganado el afecto del presidente, cuyo principal estratega, Steve Bannon, dirigió Breitbart News antes de sumarse al personal de la Casa Blanca. El portal conservador incluye los puntos de vista de la Patrulla en sus notas, al tiempo que reconoce que la apoya.
Los conductores del programa alternan entre quejas sobre las condiciones de trabajo, como radios que no funcionan en zonas remotas, y las noticias del momento. Han tildado de “terroristas domésticos” a los activistas del movimiento Black Lives Matter (Las vidas de los negros importan) y han dicho que México es “un país corrupto”.
Una mañana reciente criticaron a un empleado de una aerolínea que habló mal de la Patrulla de Fronteras cuando uno de los conductores del programa hizo los trámites para abordar un avión y también la emprendieron contra los legisladores que quieren declarar a California un estado santuario y contra quienes se resisten a acatar las directivas de Trump que apuntan a expandir la capacidad de combatir la inmigración ilegal. En la charla se abordó, asimismo, una audiencia sobre un adolescente mexicano que murió de un balazo disparado por un patrullero