Nicolás Maduro da golpe de Estado en Venezuela
Julio Borges, presidente de la Asamblea Nacional, rasgó frente a las cámaras el fallo del Tribunal Supremo de Justicia. Además, instó a la Fuerza Armada a no “seguir callada frente a la ruptura de la Constitución”
El Parlamento venezolano, de amplia mayoría opositora, acusó ayer jueves al presidente Nicolás Maduro de dar un golpe de Estado, luego de que el máximo tribunal asumió mediante sentencia las competencias del Legislativo.
“En Venezuela, Nicolás Maduro dio un golpe de Estado”, denunció el presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, quien rasgó frente a las cámaras el fallo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), calificándolo de “basura”. Borges instó además a la Fuerza Armada a no “seguir callada frente a la ruptura de la Constitución”.
“Sabemos que la inmensa mayoría de los oficiales (...) están en contra del caos que sucede en Venezuela”, sostuvo el diputado, y anunció que la cámara “se rebela y desco- noce” la decisión judicial.
La noche del miércoles, la Sala Constitucional del TSJ asumió las funciones del Parlamento en un dictamen que, según analistas, repre- senta un paso más hacia un modelo autoritario.
“Mientras persista la situación de desacato y de invalidez de las actuaciones de la Asamblea Nacional, esta Sala Constitucional garantizará que las competencias parlamentarias sean ejercidas directamente por esta Sala o por el órgano que ella disponga”, indicó el fallo.
La oposición anunció protestas a partir de mañana.
El tribunal, al que la oposición acusa de servir a Maduro, declaró en desacato al Legislativo en enero de 2016 debido a la juramentación de tres diputados opositores cuya elección fue suspendida por presunto fraude. Por ello ha anulado todas las decisiones parlamentarias.
Aunque la cámara desvinculó a esos diputados posteriormente, la corte considera que el acto no fue formalizado.
“Esta semana hemos avanzado lamentablemente hacia un modelo autoritario en la política venezolana. La democracia está en peligro”, dijo ayer a la AFP el analista Carlos Romero.
“Estamos ante un uso indiscriminado e ilegal de las atribuciones del TSJ para acabar con el Legislativo”, añadió.
Presión económica
La sentencia mediante la cual el TSJ adopta las funciones del Parlamento también tiene un trasfondo económico. Se produjo en respuesta a un recurso de interpretación sobre la creación de empresas mixtas en el sector petrolero.
Según la Constitución, el gobierno no puede firmar contratos de interés público con Estados o empresas públicas y privadas extranjeras “sin la aprobación de la Asamblea Nacional”. Pero al declarar “omisión legislativa”, la corte indicó que no existe “impedimento alguno” para que el Ejecutivo conforme compañías sin pasar por una votación de los diputados.
Esta cuestión resulta clave para el gobierno, que busca financiamiento para paliar un déficit fiscal que el Banco Mundial estimó en 11.5% del PIB en 2016. Maduro también intenta atraer inversión extranjera para los sectores petrolero y minero, y enfrentar así la grave crisis económica, reflejada en escasez de todo tipo de bienes básicos y la inflación más alta del mundo, proyectada en 1,660% por el FMI para 2017. Las gestiones en la OEA son promovidas por su secretario general Luis Almagro, quien exige convocar a elecciones generales en corto plazo y liberar a un centenar de opositores presos. Las elecciones presidenciales están pautadas para diciembre de 2018, mientras que las regionales debieron realizarse a fines del año pasado, pero el poder electoral las pospuso para 2017 y aún no fija fecha