La recompensa llegó al Motagua desde el cielo
El zurdo es un hombre de Dios y aseguró que la clave del éxito en Motagua es la unidad en el vestuario. “Nos hemos unido tanto que la actitud ganadora prevalece”, resaltó Elvir
Un día después de haber marcado el 2-2 de la semifinal entre Motagua y Real España, Omar Elvir bajó las revoluciones, dio gracias a Dios y se relajó con su familia. El lateral zurdo repasó las imágenes de las sufrida clasificación azul y recordó los minutos claves del choque contra los Aurinegros.
“Fue bravo, Real España es un gran equipo y está bien dirigido. Tienen buenos jugadores. Nosotros sabíamos que debíamos mantener la cal- ma y casta de equipo grande”. El zurdito que se formó en las canchas de la San Miguel y La Travesía relató que “ya sabíamos que iba a ser así. Es un clásico, nos jugá- bamos el pase a una Final y estos partidos así se juegan. No es casualidad que Motagua y Honduras de El Progreso estén en la final, es fruto de su trabajo”.
El Día de la Madre ya era especial para el 24 porque su mamá llegó al estadio y posó con el Ciclón. “Sí, el domingo tuve la dicha de que mi mamá salió conmigo a la cancha en el Día de la Madre. A ella, a mi esposa, a mi hija va dedicada la clasificación. Toda la gloria y honra es para Dios, se lo dedicamos al grupo y a las madres que nos dieron la motivación. La recompensa llegó del cielo por todo el esfuerzo que pusimos todos”.
Un gol que vale oro
Omar no se siente estrella en Motagua aunque su foto fue la tapa en las portadas de los diarios. “No sé si fui el héroe. Nos tocó a mí a Mayorquín contribuir con la causa. El equipo puso el alma y el resultado se vio en la cancha. Soy un afortunado de estar en Motagua”.
Entonces nos transportamos al domingo y le recordamos a Omar ese minuto 87 cuando firmó el gol que hizo explotar el Nacional.
Elvir ganó la banda izquierda, recibió un pase del Choloma López y con el alma remató al fondo de la red. Esta vez El Burrito no dio la asistencia sino que marcó el gol. “Desde que miré a Kevin López le grité que me aguantara y cuando me sirvió la pelota sin dudarlo le pegué. El de arriba me impulsó a rematar al marco y ahí está la recompensa. Estaba clarito que quería mi gol. Sin embargo, esto no se acaba aquí, hay que seguir trabajando para seguir mejorando”.
Ya son 8 los goles que acumula Elvir con la elástica del Ciclón en sus 128 juegos disputados. “Creo que uno trabaja para contribuir de la mejor manera. Tuve la bendición de anotar el gol pero el triunfo es de todos”.
¿Por qué te quedaste tendido en la grama al final del
128 juegos con el Azul lleva Omar Elvir, ganador de tres títulos con el Mimado. “El centro del éxito de este equipo en los últimos años es Dios”. OMAR ELVIR
partido? Le preguntamos a Elvir... “Yo como seguidor de Cristo le dije: Padre, pase lo que pase al final del juego voy a agradecerte en la cancha, le dije te adoro por lo que eres y no por lo que me das”.
“El centro del éxito de este equipo en los últimos años es Dios. El cuerpo técnico, directiva y jugadores nos hemos unido tanto que la actitud ganadora prevalece” siguió diciendo el 24, uno de los futbolistas de mayor experiencia en el Azul.
A pegar en El Progreso
Elvir sabe lo que es jugar una final en el Humberto Micheletti, él es sobreviviente de aquella fatídica noche en El Progreso donde Motagua perdió la copa contra HDEP.
“No se si esta vez será la revancha pero tenemos que ir a proponer allá primero y después proponer en casa como lo acostumbramos. Tenemos que ir paso a paso. Lo primero es pensar en ganar en El Progreso y la difícil visita que sostendremos”