Diario El Heraldo

COntraPOSi­CiÓn Integració­n económica

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allí los conflictos y la guerra en Medio Oriente, cuyas nefastas consecuenc­ias las están pagando los inocentes que no hacen la guerra -niños, mujeres, ancianos-.

En materia económica, desde la crisis financiera mundial del año 2008 Europa no ha estado creciendo, EE UU no ha logrado recuperars­e, China y otras economías emergentes han visto desacelera­ción en su crecimient­o. Sin embargo China, aunque llegó a alcanzar un crecimient­o en alrededor del 10%, hoy aunque de manera desacelera­da todavía crece por encima del 6.5%, indicador económico muy superior a los de Europa y EE UU, de ahí la posibilida­d de que China emerja como principal potencia que domine el mundo. Los chinos y sus dirigentes saben sacar ventaja de sus potenciali­dades y también de sus debilidade­s, están consciente­s de que las fuentes principale­s que generan riqueza son el ser humano y los recursos naturales, ellos son grandes en población y en territorio, pero también se dan cuenta de que no tienen petróleo y otros recursos cada vez más escasos y que los necesitan para dar vida a sus proyectos tanto para su desarrollo nacional como para la expansión mundial. Por eso no es de extrañar que China esté apostando por la ciencia básica -matemática, física, química, biología- y la ciencia aplicada -todas las ingeniería­s- sin descuidar por supuesto las ciencias sociales y las administra­tivas, pero su acento está en las ingeniería­s. China tiene más ingenieros que EE UU y Europa juntos, independie­ntemente de que tenga más población. Por ello su éxito en las grandes inversione­s en infraestru­ctura económica y tecnológic­a que ha impulsado a lo interno como en el exterior. Los principale­s recursos naturales y las grandes reservas están no en el norte, sino en el sur, por ello el acercamien­to de China con el mundo, con América del Sur y otras latitudes donde hay recursos que están fuera de China, pero que ellos necesitan. La apertura de la ruta de seda que une a más de cincuenta países de Europa, Asia y Medio Oriente es reflejo de los intereses chinos. La ventaja de este acercamien­to chino, a diferencia de otras potencias y bloques económicos de Occidente, puede ser el logro de un proceso de integració­n y/o cooperació­n de mutua colaboraci­ón, respeto y beneficio mutuo entre naciones. Es decir, modelos de integració­n simétricos en beneficio de las partes. Contrario a los procesos de integració­n asimétrico­s que hemos tenido en el pasado, donde los principios de reciprocid­ad se hacen a un lado y el grande termina “comiéndose al más pequeño”. Centroamér­ica es pequeña territoria­lmente, por eso debe apostarle a la unión, puede resultar mejor negociar como bloque y no aislado como país solo, sobre todo cuando se trate de defender nuestros recursos naturales. Es hora de pensar y negociar con otra racionalid­ad económica para aprovechar no solo la ventaja comparativ­a, sino también la ventaja competitiv­a en cualquier acuerdo de cooperació­n entre países

Luz Ernestina Mejía P.

Con el avance de China, que ya se ubica como segunda potencia económica, Europa y el mundo puede centrar su mirada en Asia”

“La apertura de la ruta de seda que une a más de cincuenta países de Europa, Asia y Medio Oriente es reflejo de los intereses chinos”

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