El puente colonial más antiguo, el Mallol
En 1816, siendo el alcalde mayor don Simón Gutiérrez, comenzó la construcción del puente sobre la zona donde se encuentra el Mallol. Un año después fuertes aguaceros destruyeron las bases y se llevaron los materiales de construcción.
Es así que al llegar el año 1818 el último alcalde mayor peninsular que tuvo la Villa de San Miguel de Heredia de Tegucigalpa, don Narciso Mallol, originario de Valencia, España, buscó levantar un puente para unir la Villa con el pueblo de indios de Comayagüela. El proyecto le fue encomendado al arquitecto José María Rojas, pero después de examinar los bosquejos y planos del puente no le agradó. Así que se contrataron los servicios del arquitecto Juan Bautista Jáuregui y luego al maestro de obras don Miguel Rafael Valladares.
En la construcción se levantaron primero las bases, luego los diez arcos, que unen las pilastras y sostienen la plataforma, la cual se reforzó con un encofrado de madera resistente, además de metro y medio de muro o balaustrada. Esta obra se concluyó tres años después en junio de 1821, mismo año en que falleció Mallol y esa es la razón por la cual lleva el apellido del último alcalde español.
Su estilo y arquitectura española, construida de piedra cincelada, cal y arena, de construcción sólida, tenía en su diseño original una plataforma central que era para carretas.
Luego con los años se le hicieron varias modificaciones, principalmente en el siglo XX, se le construyen los pasamanos al lado de los muros para paso de peatones ya que empiezan a circular
"Esta magnífica obra une las ciudades gemelas, siendo el primer puente de la capital y a nivel nacional".
los primeros automóviles que llegaron a la capital.
Ya casi al llegar al bicentenario de esta majestuosa obra, ha resistido a las tormentas tropicales, fuertes aguaceros y crecidas del río Choluteca, esto demuestra la solidez y calidad con que se construyó.
En la actualidad esta magnífica obra une las ciudades gemelas, siendo el primer puente de la capital y a nivel nacional, además de ser la última obra colonial en el país.
Es por esta razón que debe considerarse declararlo Patrimonio Nacional, ya que forma parte de nuestra historia e identidad como ciudad capital