Primero el Peatón
La Corporación Municipal aprobó la semana anterior una nueva ordenanza denominada Primero el Peatón, con la que se pretende proteger al más vulnerable frente a la jungla de carros particulares, buses, rapiditos, motos y taxis que circulan en la capital.
Y es que de nada valieron campañas para concienciar a los conductores de automotores para que respeten el derecho de los peatones. Se detienen sobre los pasos de cebra, no ceden lugar ni aminoran la velocidad ante el transeúnte que debe replegarse para evitar accidentes. Esa es una de las peores caras de la incivilidad que abunda entre quienes, cómodamente sentados tras el volante y protegidos bajo un techo, son incapaces de mostrar cortesía ante aquellos que caminan bajo el sol o la lluvia, sean madres con sus hijos o ancianos que van solos. El plan de las autoridades incluye construir más aceras y reparar las que están dañadas, hacer cruces de calles, señalizar y delimitar las estaciones del transporte urbano y colectivo.
Es de señalar, no obstante, el grave problema de estacionamientos que hay en la capital, que obliga a muchos conductores a aparcarse sobre las aceras, exponiendo la seguridad de los peatones que deben pasar por la calle. También el desmantelamiento de puentes peatonales que no han sido repuestos. La medida de la Alcaldía incluye también a unos 18 mil ciudadanos con movilidad limitada, el 80 por ciento de ellos adultos mayores. En suma, si la culturización de motoristas y peatones, que también muestran en ocasiones imprudencia temeraria, no ha sido posible, establecer una normativa podría generar un cambio, pero siempre y cuando se haga cumplir. De lo contrario será una ordenanza más.
Otra disposición que vendrá a poner un poco de orden es la del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT) para delimitar las áreas donde prestarán servicio las más de mil mototaxis que circulan en la ciudad, mientras la municipalidad se encargará de colocar rótulos para anunciar los espacios en los que serán permitidos su funcionamiento. Son medidas que darán un rostro más humano a la ciudad, donde la norma ha sido el total irrespeto a los derechos de los peatones, como si el conductor que se baja de su carro no se convirtiera también en uno de ellos