Escapó reo que tenía permiso
El sistema penitenciario hondureño adolece de graves fallas y el caso más reciente, que daría ganas de reír si no fuera porque indigna tanto, es el del reo al que le daban permiso para salir y no regresó más. Al final fue recapturado, pero lo insólito es que se trata de un convicto por asesinato, ¿merecen esos condenados permisos de salida? Solo aquí pasa. Un hombre encarcelado por quitar la vida a otra persona no debería tener semejantes privilegios y si este tipo hubiese cometido algún crimen contra otro ser humano, el gobierno sería el culpable por la negligencia mostrada en este caso.
Hace poco también trascendió que hasta router tenían en el penal progreseño y que hallaron un arsenal y millones de lempiras en el de San Pedro Sula. Entonces, ¿cuáles cambios, cuáles medidas de control, cuál rigor de las autoridades? Las cosas siguen igual o peor que antes. Y, para colmo, cuando agarraron a aquel doctor emisario de una nota extorsiva, lo dejaron libre porque no pudieron dizque justificar su detención.
Solo en nuestro país pasan estas cosas. Los del sistema penitenciario son unos ineptos y el presidente en campaña anda pregonando que ahora hay orden, pero lo cierto es que los hechos revelan lo contrario. Sigue habiendo corrupción, sigue habiendo inoperancia, sigue habiendo falta de voluntad y capacidad para agarrar al toro por los cuernos. Es de imaginar que son tantos los millones que circulan que ha sido imposible evitar la contaminación de empleados penitenciarios, o que estos no han sido depurados como anunciaron que harían. ¿Qué más tendrá que pasar para que veamos cambios de verdad?