PERDIERON LA LUCHA
Kurt Cobain. Es uno de los casos más emblemáticos de la música. El integrante de Nirvana acabó con su vida movido por una profunda depresión. Philip Seymour Hoffman.
Su depresión fue recurrente desde que era un niño, y aunque el actor estuvo en tratamiento, no logró superar su situación. Robin Williams.
El actor sufrió depresión severa. En el último tiempo de su vida había recaído en las adicciones, hasta que se suicidó. Chris Cornell.
Una combinación de adicciones a drogas y depresión fue el detonante de la muerte del cantante estadounidense. Chester Bennington. Antes de morir dio señales de que algo andaba mal, nadie lo notó y al final el vocalista de Linkin Park sucumbió ante su depresión.