Texas bajo el agua
Los vestigios del huracán Harvey dejaron a su paso inundaciones devastadoras ayer en la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos; el creciente nivel de agua afectó a miles de personas que tuvieron que subirse a las azoteas o a zonas altas y sobrepasaron la capacidad de los rescatistas, que no pudieron atender todos los pedidos de ayuda. Por la tarde se hablaba de al menos cinco personas muertas por las inundaciones, pero solo tres de los decesos habían sido confirmados oficialmente. Helicópteros, botes y vehículos acuáticos recorrieron los vecindarios de Houston para ayudar a la gente a salir de sus casas o del agua turbia, la cual tenía un nivel tan alto que en algunos lugares alcanzó las segundas plantas. La inundación fue tan extensa que las autoridades tuvieron problemas para identificar las áreas más afectadas. Exhortaron a la gente a trasladarse al nivel más alto de sus hogares para evitar quedar atrapadas en sus áticos, y que ondearan hojas o toallas para que atrajeran la atención a su ubicación. Conforme el nivel del agua incrementó, el Servicio Meteorológico Nacional ofreció otro inquietante pronóstico: antes de que la tormenta pase, algunas partes de Houston y sus suburbios podrían recibir hasta 1,270 milímetros de lluvia, la mayor cantidad registrada hasta ahora.