Emboscada Hondureño detenido por FBI era fanático del grupo terrorista ISIS
Vicente Solano fue engañado por agentes del FBI encubiertos en Miami
El hondureño Vicente Solano, de 53 años de edad, quien fue detenido por las autoridades estadounidenses, era fanático del grupo terrorista ISIS.
Según miembros de la Agencia Federal de Investigación (FBI por sus siglas en inglés), Solano actuaba solo y planeaba ejecutar un asalto con armas de destrucción masiva en el Dolphin Mall situado en El Dorado, Florida.
El FBI afirmó que se encontraron varios videos a favor de ISIS creados por Solano, sin embargo, no son pruebas suficientes para vincularlo con la organización.
El hondureño fue capturado el pasado domingo en el Dolphin Mall gracias a un plan organizado por el FBI. El lunes fue llevado hasta la Corte Federal de Miami donde las autoridades presentaron una denuncia penal y declaración jurada.
Las autoridades del estado trabajaron junto el FBI de solano es detenido
El plan ya estaba en marcha en el momento en que Solano tomó las llaves de su carro y se dirigió al Dolphin Mall. Se reunió en un hotel con los agentes encubiertos del FBI para, minutos después, comenzar el ataque.
Vicente Solano llegó al estacionamiento del Dolphin Mall de Miami y, con la bomba en mano, caminó hasta la entrada ya planeada, sin embargo, fue arrestado por los agentes antes de que pudiese entrar al edificio.
El FBI dio a conocer el plan con el cual pudieron capturar al hondureño Vicente Solano y de esta manera corroborar su conexión con ISIS.
Un informante que mantenía conexión con Solano le comentó el plan que tenía el hondureño al FBI.
Varios agentes del FBI encubiertos se hicieron pasar por miembros de ISIS y se relacionaron con Vicente, a quien le propusieron crear una bomba.
El día de la captura agentes con capuchas le entregaron al hondureño una bomba falsa para que la detonara en el centro comercial.
Justo antes de que lograra detonarla, miembros del FBI lo capturaron.
Un agente comentó que Vicente le había confesado que quería hacer eso por el sentimiento de exclusión que le generaba su estatus migratorio.
Vicente llegó a Estados Unidos hace 20 años y laboraba como pintor, lo que le generaba un ingreso de 13 dólares la hora