Reprobación escolar aumentó un 28 por ciento este año
Datos oficiales de la Secretaría de Educación dicen que 32,000 estudiantes de todos los niveles educativos reprobaron al menos una materia
La cifra de estudiantes reprobados en el sistema educativo dio un considerable repunte este año.
Reportes oficiales de la Secretaría de Educación revelan que este año al menos 32,000 niños y jóvenes de los distintos niveles educativos del país “se quedaron” en al menos una asignatura.
Esto representa un incremento del 28% en comparación a la cifra del año pasado cuando fueron 25,000 los aplazados.
Solo del nivel medio, son 12,000 los jóvenes que pasarán diciembre y enero en la llamada “escuelita”, programa que forma parte del Todos Podemos Avanzar (TPA) y que se desarrolla a final de cada año.
Mientras que en el nivel básico, fueron 20,000 los reprobados a nivel nacional.
Las materias básicas de matemáticas y ciencias naturales fueron las que hicieron que los estudiantes no pudiesen terminar su año académico en total solvencia.
La cifra total de reprobados en el país no representa ni el 2% del total de la matrícula en el sistema. Por lo cual no es tan alarmante porque en años anteriores se llegaba a 59,000 reprobados, como en 2015.
Alumnos confiados
Las causas de la reprobación escolar pueden ser variadas; mala alimentación, problemas familiares, entre otros. Sin embargo, los maestros afirman que este año fue otro el factor que detonó el incremento en la reprobación. “Se confiaron, se quedaron esperando la segunda recuperación, los estudiantes estaban esperanzados de que si hubiera otra oportunidad i b a n a p a s a r ”, mencionó Carlos Suazo, dirigente del Colegio Profesional Unión Magisterial de Honduras (Coprumh).
De acuerdo con él, el sistema de evaluación ha sido “permisivo” con los estudiantes y para cuando se enteraron que no habría otro examen de recuperación, era tarde para salvar sus materias.
También los padres de familia juegan un papel importante para mejorar el rendimiento, consideró.
“Para que la educación sea realmente efectiva la participación de los padres es fundamental en el proceso de aprendizaje de los estudiantes... Los padres, muy cómodos, todo el trabajo se lo dejan a los docentes”, ex- presó el maestro.
Mientras que los padres afirman que debe haber mayor compromiso de parte de los educadores.
Andrés Martínez, de la Asociación de Padres de Familia, expresó: “El aprendizaje es en doble vía, por un lado el esmero, disciplina y esfuerzo por parte del estudiante; pero además, la dedicación y compromiso por parte del docente. El actual sistema de evaluación no es consecuente con la realidad que vive el país”, señaló.
“Una patastera”
Lo que urge para que las cifras de aplazados disminuyan es una renovación del sistema de evaluación. Así piensa el vicerrector de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), José Darío Cruz.
“Padres de familia, docentes y alumnos han entendido mal el funcionamiento del sistema, se supone que durante el año lo que se aplica es el modelo de evaluación continua, ese modelo no debe permitir dos recuperaciones”, explicó el académico. Afirma que las cifras de aplazados son mayores, pero que por “conveniencia” de la Secretaría se modifican los indicadores.
“El sistema ha vuelto más haraganes a los estudiantes, dos recuperaciones, TPA escuelitas y demás, lo que tenemos es una patastera académica en la cabeza, el modelo dice una cosa, pero en la práctica se hace otra. Me atrevo a decir que las cifras son del triple, pero algunos maestros modifican los cuadros de notas”, cerró