Diario El Heraldo

Xos consumidor­es prefieren productos creados por error

-

estudio, dimos una opción a los consumidor­es para que escogieran entre un nuevo sabor de chocolate y más dinero. Antes de tomar su decisión, se informó a los consumidor­es que un chef había dejado una tanda de chocolates en el horno cinco minutos más, lo cual había producido un nuevo sabor de chocolate. A unos se les dijo que había sido por error y a otros, que había sido intenciona­lmente. Los consumidor­es tendieron más a escoger el chocolate cuando sabían que había sido hecho por error que cuando pensaban que había sido hecho así a propósito.

No obstante, ¿los consumidor­es escogieron el chocolate que tuvo su origen en un error porque este resultó ser bueno? ¿Qué sucede cuando el error empeora el producto?

Para probar esto, presentamo­s a los consumidor­es una obra de arte que tenía una mancha que le restó valor a su atractivo. Cuando se mencionaba que la obra de arte manchada se había hecho por error, los consumidor­es tendieron a comprarla, y a pagar más por ella.

Así que, ¿por qué los consumidor­es quieren productos que están hechos por error? Propusimos que la tendencia hacia la intenciona­lidad hizo que los consumidor­es percibiera­n que las creaciones con errores eran más exclusivas. Esto es, la gente supone que los demás hacen lo que tienen planeado hacer, por lo tanto cuando un

producto se aleja de la intención ( un error) se considera más improbable.

Para probar la psicología subyacente hicimos que todos los consumidor­es escucharan la misma canción de hip-hop. Antes de escucharla, a unos se les dijo que se había grabado el alien- to del productor en la mezcla por accidente y a otros, que se había grabado así deliberada­mente. Los consumidor­es estuvieron dispuestos a pagar más por la canción cuando sabían que se había hecho con un error que cuando sabían que se había hecho así a propósito.

Xa rareua que se percice de los errores aumenta el valor

Es importante considerar que incluimos una tercera condición, en la cual se decía a los consumidor­es que la canción tenía un error por accidente, pero que el resultado del error no la hacía exclusiva. Esta vez, los consumidor­es no quisieron pagar más. Los consumidor­es prefieren productos hechos por error solo cuando el error es exclusivo.

Finalmente, observamos subastas de fotografía­s antiguas originales que vendió el mismo comerciant­e en eBay, algunas de las cuales tenían errores y otras no.

Encontramo­s que, en efecto, los consumidor­es pagaron más por las fotografía­s con un error en su creación que por las fotografía­s sin él.

Las empresas y los empresario­s suelen no divulgar los errores en la creación de sus productos porque temen que los consumidor­es perciban los productos de forma

negativa. Nuestra investigac­ión sugiere que está estrategia podría no estar justificad­a.

(Taly Reich es ayudante de cátedra de mercadotec­nia en la Escuela de Administra­ción de Yale. Daniella Kupor es ayudante de cátedra de mercadotec­nia en la Universida­d de Boston. Rosanna K. Smith es ayudante de cátedra de mercadotec­nia en la Universida­d de Georgia)

 ??  ?? Los consumidor­es prefieren productos hechos por error solo cuando el error es exclusivo.
Los consumidor­es prefieren productos hechos por error solo cuando el error es exclusivo.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Honduras