Canadá se prepara ante posible ingreso masivo de inmigrantes
Unos 195 mil salvadoreños y alrededor de 50 mil haitianos se encuentran a la deriva tras la anulación del Estatus de Protección Temporal (TPS). Canadá se alista para buscar albergue a los tepesianos
Canadá “quiere asegurarse de estar listo” para evitar una eventual llegada masiva de inmigrantes salvadoreños residentes en Estados Unidos, a los cuales el gobierno de Donald Trump les quitó el estatuto especial que los protegía, dijo el ministro de Seguridad Pública. Washington anunció el lunes la supresión, desde el 9 de septiembre de 2019, del Estatuto de Protección Temporal (TPS) instaurado en beneficio de los salvadoreños desde 2001, tras un devastador terremoto. “Debemos estar listos para afrontar todas las eventualidades y lo estamos”, dijo el ministro Ralph Goodale a la cadena de televisión CBC.
Canadá trabaja en medidas de contención “desde hace meses” con el fin de evitar una repetición de la llegada masiva de inmigrantes haitianos en el verano pasado, luego que Estados Unidos decidiera quitarles el TPS que los beneficiaba. En el transcurso de los 18 meses previos al fin del TPS para unos 200,000 salvadoreños residentes en Estados Unidos, el gobierno canadiense “entrará en contacto con grupos y organizaciones” que representan a esa comunidad en Estados Unidos para disuadirlos de atravesar ilegalmente la frontera entre ambos países norteamericanos, que se extiende por 800 km. Goodale estimó que ese plazo es suficiente para que su país se organice y precisó que fue una demanda que el gobierno de Justin Trudeau formuló a su par estadounidense.
No está listo
Hugo Castro creía que era un joven con suerte: cuando tenía 17 años dejó El Salvador para estudiar en Estados Unidos, pero tres décadas después fue deportado y obligado a rehacer su vida en un país que ya no reconocía. “El principal problema que pasan los deportados es que nos invisibilizan, nos rechazan; no hay trabajo, no nos ayudan”, dice Castro, quien fue deportado en 2015. El anuncio del gobierno del presidente Donald Trump también trajo temores de que El Salvador podría perder una importante fuente de ingresos, a través de las remesas que envían desde Estados Unidos, además de que muchas familias podrían quedar separadas. Algunos, sin embargo, también vieron con cierto optimismo que los salvadoreños que tienes años de vivir en aquel país podrían traer su experiencia al país y posiblemente detonar inversiones. Castro es uno de quienes temen que la llegada de esos salvadoreños protegidos hasta ahora por el TPS podría ser complicada, tanto en términos personales como para el país. Y usa su propio caso como ejemplo. Por su parte el director del no gubernamental Instituto Salvadoreño del Migrante (Insami), César Ríos, advirtió que “no estamos preparados para una deportación masiva”. “Ni Estados Unidos está preparado para una deportación masiva, ni El Salvador para recibirlos”, resumió Ríos. La economía dolarizada de El Salvador recibió en 2016 4,576 millones de dólares en remesas familiares desde el extranjero, equivalente a 17.1% del producto interno bruto (PIB), según cifras oficiales. Las remesas, que en 2017 registraron un incremento de 10%, proceden mayoritariamente de EUA