Nuevos jefes deben garantizar el trabajo de la Depuradora
A juicio de Omar Rivera, miembro de la Comisión, la nueva cúpula debe garantizar el trabajo de la Depuradora
Luego del nombramiento de la cúpula de la Policía Nacional, la reacción de los representantes de la Comisión Especial de Depuración de la Policía Nacional no se dejó esperar.
“De cara al futuro, uno de los grandes desafíos de la nueva cúpula policial es garantizar la sostenibilidad de las reformas que se han puesto en marcha por la Comisión Especial para la Depuración y Transformación de la Policía Nacional de Honduras”, dijo Omar Rivera, miembro de esa instancia depuradora.
Asimismo, recomendó a los nuevos jerarcas de la institución armada “implementar las disposiciones emanadas de la nueva Ley Orgánica de la Secretaría de Seguridad y de la Policía Nacional, y la Ley de la Carrera Policial”
Además, Rivera indicó que es fundamental “garantizar que continúe funcionando, como hasta ahora, el sistema renovado de Educación Policial y fortalecer las capacidades de investigación criminal”.
“Los nuevos líderes de la Policía Nacional deberán poner mucho esfuerzo en garantizar la sostenibilidad de los logros de este proceso de reconstrucción de la Policía hondureña y tal como se mencionó anteriormente, formar a los oficiales en un modelo educativo con enfoque
comunitario que les concientice sobre el respeto de los derechos humanos de los ciudadanos, especialmente los grupos vulnerables”, exteriorizó el dirigente de la sociedad civil.
“La nueva cúpula policial debe seguir con la filosofía de la Comisión, en torno a que quien la hace, ahora la paga en la Policía Nacional”, manifestó. En tan solo 21 meses de trabajo esta Comisión conformada por notables miembros de la sociedad hondureña hizo lo que a lo largo de los años no pudieron hacer la Dirección de Asuntos Internos de la Policía y la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial. Los números de la Comisión de Depuración indican que fueron 4,580 agentes, entre oficiales de alto rango y efectivos de la escala básica, los separados definitivamente de la institución. Entre ellos figura una lista negra de oficiales y agentes que se vieron envueltos en crímenes de alto impacto, además, en asquerosos actos de corrupción