Enseñarán este año a capitalinos a clasificar la basura para reciclarla
Reciclaje Con la habilitación de una planta de separación de desechos sólidos, las autoridades locales buscan establecer medidas de control de los residuos en los hogares y comercios de la capital
El envase de plástico de un refresco, una revista recortada y los restos del almuerzo ya no podrán ser desechados en una sola bolsa para basura. Las autoridades locales buscan formalizar a partir de este año la clasificación de los desechos sólidos de los hogares y comercios capitalinos.
Esta labor se realiza con el fin de que la ciudad se transforme en un centro piloto para una planta integral de separación de residuos sólidos.
En la actualidad, de las 800 toneladas diarias de basura que se generan en la ciudad, solo 70 de ellas son destinadas al reciclaje.
Del total reciclado, un estimado de 16 toneladas se clasifican en el vertedero de basura por parte de los 288 pepenadores que acuden a diario al lugar y el resto es captado por otras personas antes de que lleguen a los camiones recolectores de basura.
Lo que preocupa a las autoridades locales en la actualidad es el desperdicio de material como el papel y el cartón que al entrar en contacto con desechos orgánicos se daña y ya no puede ser aprovechado para una nueva función.
Por ejemplo, el cartón representa el 10 por ciento de desechos que llegan al botadero municipal y de este solo se logra rescatar un dos por ciento.
De manera que desde la Superintendencia de Aseo Municipal se impulsará un programa de educación ambiental denominado Recicla2, que en una primera etapa consistirá en educar a los vecinos de 900 colonias con el objetivo de explicarles sobre la clasificación de desechos sólidos.
La razón de esta actividad es que en un promedio de dos años los ciudadanos “se cambien el chip” en favor del ambiente. Por lo que los camiones recolectores de basura tendrán depósitos clasificados para el papel, plástico, latas, vidrio y desechos orgánicos, con el fin de facilitar los trabajos en la planta de separación.
Esta medida será regulada en el Plan de Arbitrios y por medio de un reglamento.
Esto implicará que los pobladores no puedan mantener fuera la basura de sus hogares, mientras no pase el tren de aseo.
“Tendremos que empezar con una planta sucia porque no podemos esperar, y la meta es que sea una planta de separación limpia”, manifestó German Pavón, titular de la Superintendencia de Aseo Municipal.
En la actualidad, las autoridades trabajan en el diseño de esta planta de reciclaje que pretende generar fondos que permitan sostener los gastos de la nueva unidad, tanto en el equipo humano como en el logístico