No guarde silencio, denuncie la violencia doméstica
Consejería La especialista en trabajo social nos explica cómo manejar el tema para darle solución a esta problemática que tanto afecta a la mujer y a su núcleo familiar
Por el Día de la Mujer, los homenajes para exaltar el éxito femenino abundan, pero también es una fecha propicia para hablar de un tema que golpea constantemente la realidad de la mujer: la violencia doméstica.
Junto con la licenciada en trabajo social, Sara Sauceda, abordaremos los puntos más importantes de este problema. Según la experta, todo inicia por definir que el término refiere a todo patrón de conducta asociado a una situación de ejercicio desigual de poder que se manifiesta en el uso de la fuerza física, violencia psicológica, patrimonial, sexual, intimidación o persecución sobre la fémina.
¿Qué señales identifican la violencia doméstica ? Lo primero que se detecta es baja autoestima, relaciones conflictivas, rechazo por parte de la mujer a admitir su situación, golpes físicos, traumas psicológicos en hijos y en ella misma, así como la pérdida de peso o aumento por su situación emocional.
No todo es golpes, es decir, ¿qué tipos de violencia existen? Física, que corresponde a toda acción u omisión que produce un daño o menoscabo a la integridad corporal de la mujer; psicológica, que es todo acto cuyo propósito es degradar o controlar las acciones, comportamientos, creencias y decisiones de ella por medio de la manipulación, amenazas, humillaciones y otras agresiones en perjuicio de su salud psicológica. También existe la sexual, que es toda conducta que entrañe amenazas o intimidación que afecte la integridad o la autodeterminación sexual de la mujer; y por último la patrimonial, que es toda situación violenta, deterioro o pérdida de objetos y bienes materiales de la mujer o del núcleo familiar.
¿Dónde acudir si es víctima? Lo mejor es presentar la denuncia a las autoridades más inmediatas, ya sea postas policiales cercanas a la vivienda, recurrir a las leyes de protección hacia la mujer y la niñez, en caso de que los hijos también sean víctimas de violencia, y buscar el personal adecuado a la orientación y el apoyo para solución de la problemática.
¿Cómo salir de este círculo vicioso en busca de ayuda? Separación inmediata de la pareja agresora y debe haber aceptación por parte de la mujer de que está siendo víctima de ello. Las terapias psicosociales le permiten a la fémina una incorporación de ella a espacios de vínculos sociales en terapias funcionales y espirituales, para que su mente establezca un cambio de actitud hacia ella misma
El núcleo familiar desarrolla un papel muy importante para la superación de sus traumas, es importante el amor y el respeto”.