Amigos inseparables en medio de la soledad
Historia Desde que se conocieron hace varios meses, José Servando Reyes Ventura y Jimmy Morales se han convertido en amigos y comparten día y noche. Se dedican a recolectar materiales reciclables para obtener dinero y comprar y cocinar los alimentos. Much
Cocinan, comparten y duermen bajo los árboles del área verde del anillo periférico, a inmediaciones de la colonia Bella Oriente de la capital.
José Servando Reyes Ventura y Jimmy Morales se conocieron hace varios meses en las cercanías del mercado Mayoreo en la salida a Danlí y desde ese momento son amigos inseparables y se ayudan el uno con el otro.
Don José contó que tiene 48 años de edad y que es originario de Goascorán, en el departamento de Valle.
Mientras que Jimmy Morales tiene 46 años y es originario y residente en Tegucigalpa.
Una tarde, don José se encontró a Jimmy sin imaginarse que serían como hermanos, pues todos los días preparan los alimentos en un improvisado fogón donde colocan una pequeña cacerola para cocinar lo que han logrado conseguir en el transcurso del día.
A eso de las 11:20 de la mañana del pasado sábado, EL HERALDO encontró a don José preparando un suculento almuerzo.
En medio de sus pertenencias tenía media libra de arroz, cebollas, tomates, consomé y cubitos.
También aguacates maduros que les había regalado una amiga.
“Este arroz va a quedar de miedo, pues lleva bastantes condimentos”, dijo José, mientras Jimmy andaba comprando las tortillas a unos pocos metros de donde estos dos hombres han convertido su residencia, donde las personas que transitan por el sector los ven desde el momento que empiezan a encender el fuego, pues en algunas oportunidades se observa el humo y en algunos casos la llama de fuego del fogón.
“Yo puedo cocinar porque viví en los Estados Unidos y trabajé en un restaurante quince años”, contó José Servando.
Cristiano
Al hombre de piel trigueña, percudida por los rayos del sol, le cuelga en su pecho un escapulario, pues asegura que es cristiano y, por supuesto, hijo de Dios.
Lo que impresiona del humilde hombre es que habla el inglés muy fluido.
Comentó que cuando vivió en Estados Unidos se interesó en hablar dicho idioma porque tenía que atender a los clientes del negocio donde trabajaba y porque no contaba con documentos de residencia, fue capturado por la Policía y deportado a Honduras.
Al regresar a Honduras no volvió a saber nada de su familia y se ha dedicado en los últimos años a vivir en la calle, donde ha aprendido a sobrellevar una vida con los “amigos” que se encuentra y que comparte lo que logra obtener.
Jimmy Morales se ha convertido en su inseparable amigo, a quien le confía los problemas que tiene.
“Los dos nos ayudamos. Aquí cocinamos, aquí comemos y aquí dormimos”, dijo Jimmy en el momento en que se llevaba un bocado de comida a la boca y señalaba el fogón y la colchoneta en donde duermen en horas de la noche.
Detalló que se quedan durmiendo cerca de la entrada principal a la colonia Bella Oriente, pues allí tienen cerca a los vigilantes de ese sector.
“En horas de la noche es peligroso dormir aquí y por eso es que decidimos acercarnos a los vigilantes, pues ellos nos cuidan”, contó Jimmy.
“Don José es como mi hermano, por eso cuando tengo dinero le doy y si él tiene me da para comprar lo que necesito”, dijo este hombre que es padre de una niña de cinco años de edad.
Sin duda que don José y Jimmy son verdaderos amigos e inseparables, que comparten a pesar de sus dificultades
15 años vivió don José en Estados Unidos y sabe hablar inglés.