La realeza de España en el ojo del huracán
El escándalo Tras el final de la Misa de Pascua, suegra y nuera protagonizaron un episodio que deja al descubierto la otra cara de la familia real española
Aunque la reina Letizia ha querido restarle importancia al incómodo momento que tuvo con doña Sofía al final de la Misa de Pascua, el asunto no ha hecho más que revivir un secreto a voces: la relación entre ambas no es tan cercana ni amistosa.
Algo que la soberana ha calificado como “una tontería” y un “gesto natural”, ha sido interpretado como un episodio irrespetuoso hacia la madre del rey, y la noticia ha generado escozor y muchos titulares en los medios españoles e internacionales. La presión se siente, y una amiga de doña Letizia, Imma Aguilar, ha dicho que ella está “preocupada y desolada”. Aunque oficialmente no se ha emitido ningún comunicado sobre por qué la reina impidió que su suegra y sus hijas fueran fotoentonces
grafiadas al final de la Misa de Pascua en la catedral de Mallorca, y no en una, sino en dos ocasiones.
La relación
Pero este desliz al parecer es una situación recurrente en la vida privada de la familia real española. La mala relación entre la reina y doña Sofía tiene antecedentes. Si allá por 2003 la novia del príncipe Felipe hablaba sobre el cariño entre ella y la familia del heredero, el ejemplo que era para ella doña Sofía y la impagable ayuda que le había brindado; en 2018 eso se ha esfumado.
Según señalan medios españoles, el origen de los desencuentros entre ambas es el apoyo público y privado que doña Sofía le ha expresado a la infanta Cristina y su esposo Iñaki Urdangarin, con quienes doña Letizia tiene una muy mala relación.
La reina considera que los escándalos en los que se han visto envueltos los Urdangarin le hacen daño a la corona, y le molesta que doña Sofía insista en involucrar a su hijo en una relación más cercana con su hermana y su esposo.
Según declaraciones de la amiga de la reina, Inma Aguilar, lo que sucedió en