La santa guerra de Trump

Escrito en la Biblia está que será destruida la ciudad de Damasco, siendo más específico el versículo es Isaías, 17:3. Y es que al parecer la guerra del tan polémico presidente de una de las potencias mundiales, el señor Donald Trump, no solo es contra los latinoamericanos, sino también contra el pueblo de Israel, que “aparentemente es rico en petróleo”.

A a lo largo de la historia, la nación de la Estatua de la Libertad se ha dedicado a invadir a países que cuentan con este tipo de recursos. Siria cuenta ya con millones de refugiados debido a la situación que atraviesa y ahora se les avalancha este ataque, al ver las imágenes veo la destrucción como en Sodoma y Gomorra, y es que en seis años que tiene el régimen de Bashar al Asad, es la primera vez que lo atacan.

Trump justifica su ataque diciendo que Siria inició los ataques químicos utilizando un gas llamado gas sarín, líquido incoloro e inodoro, el cual es tan potente que basta un miligramo para matar a un ser humano. Trump habla de parar una masacre, iniciando una nueva, ¿paradójico no?, los misiles tomahawk viajan a una velocidad de 880 kilómetros por hora, y mientras Gran Bretaña apoya la destrucción al igual que Francia, Rusia, tras la figura de Putin, dice que el ataque estadunidense violó las normas del derecho internacional, e Irán condenó también dicho ataque.

A ciencia cierta, aún es muy prematuro decir si viene la III guerra mundial, lo que sí es evidente es el genocidio que se está dando en Siria, una guerra que para muchos está fuera de contexto. Fernando Erazo LICENCIADO EN LETRAS