EN LAS MANOS DE KEYLOR

El portero acostumbra a hacerla de peluquero en las concentraciones del Madrid y a diario lee la Biblia. Encaró a Pinto en el Mundial de 2014 y le regaló un vehículo nuevo a su abuelo, apenas empezó a trabajar. Así es la estrella tica...

Nació en un pequeño poblado de Costa Rica, abrazó el gusto por la portería desde niño, llegó al Real Madrid tomando como puente el Mundial de Brasil y hoy con el estandarte de figura de élite es el gran referente de la Sele de cara a la justa de Rusia 2018. No hay duda que el portero Keylor Navas es la gran carta de presentación de la selección costarricense. Su titularidad y sus logros en la Casa Blanca dictan que Costa Rica estará guiada por una estrella de talla Mundial. Sus 10 títulos con el Madrid hablan por sí solos: dos Champions League seguidas, una Liga, tres Supercopas de Europa, una Supercopa de España y tres Mundiales de Clubes. Con el membrete de ser el único jugador de Concacaf que ha sido bicampeón de la Liga de Campeones, Keylor cargará con el peso de su selección en Rusia, tal como lo hizo en Brasil.

Tercer mejor del mundo

El oriundo de Pérez Zeledón fue clave para que Costa Rica pasara en el grupo de la muerte (Italia, Uruguay e Inglaterra) y con sus paradas en los penales metió a su selección hasta los cuartos, en donde cayeron heroicamente en penales ante Holanda. Su gran actuación no solo le sirvió para ser fichado por el Madrid (2014), si no que lo catapultó como el tercer portero en la historia de los mundiales en el porcentaje de paradas. Creyente fiel en Dios y hombre de familia, el máximo embajador del fútbol de la Concacaf en la actualidad quiere guiar a Costa Rica en su segundo mundial adulto. El primer paso será desafiar el grupo E compuesto por Brasil, Suiza y Serbia