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La diversidad, un tema clave para la niñez
El término diversidad se refiere a la diferencia o a la distinción entre personas, animales o cosas, a la variedad, a la infinidad o a la abundancia de cosas diferentes, a la desemejanza, a la disparidad o a la multiplicidad, a la heterogeneidad.
La pedagoga Matilde Matínez Cubas habla al respecto. Las escuelas, cada vez más, reflejan en las aulas la diversidad que existe en la sociedad, de allí la necesidad de que los padres y la familia formen principios
de tolerancia en cuanto a género, a cultura, en el ámbito social y personal. Como padre, usted puede ayudar a preparar a sus hijos a ser comprensivos y tolerantes con las demás personas por medio del elogio de las diferencias y la creación de oportunidades para que interactúen con personas de diversos contextos.
Los niños deben entender que aunque todos somos humanos, no todos somos iguales, que las personas tienen diferentes formas de
ver el mundo, preferencias de mucha índole, elementos culturales diferentes; eso debemos de ir induciendo en nuestros niños, lo que lleva a la aceptación de las personas independientemente de su color, sexo, orientación sexual o capacidades mentales y físicas.
El respeto es fundamental, el niño debe comprender que la diversidad existe y como tal se debe respetar. Los niños deben aprender a hacer amigos y respetar a los demás, independientemente de su color de piel, de sus rasgos, de cómo es su pelo, si es chino, árabe o indígena, si habla otro idioma, y a respetar su cultura y sus tradiciones.
Además, es importante que comprendan que la diversidad nos trae riquezas de informaciones y de experiencias, que podemos aprender mucho con las diferencias. En lugar de criticarla, debemos aprender de ellas y darle su valor real. Esa es una tarea importante principalmente en los tiempos actuales, en que cada día son más las familias que emigran e inmigran de un lugar a otro