1,522 estudiantes murieron en 8 años
El estudio referido a los homicidios en estudiantes de todos los niveles académicos fue realizado por el Observatorio Nacional de la Violencia. Comprende el período de tiempo entre el año 2010 y marzo de 2018
Las estadísticas lo evidencian. La población en etapa estudiantil es una de las más abatidas, víctimas de la criminalidad imperante en el país, en los últimos ocho años.
Prueba de ello son las 1,522 muertes violentas de estudiantes de todos los niveles académicos, ocurridas desde el 1 de enero del 2010 hasta el 31 de marzo del presente año.
Estas cifras están estampadas en un minucioso estudio realizado por el Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (Iudpas) y el Observatorio Nacional de la Violencia (ONV) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Estudiantes de todos niveles
De los 1,522 estudiantes hondureños que murieron durante ese período de tiempo de casi ocho años, 802 de ellos, el 52.6 por ciento, eran alumnos de educación media, de primero de ciclo común a tercero de diversificado.
Asimismo, 343 jóvenes de los que en las investigaciones post mortem no se estableció con certeza a qué nivel educativo pertenecían. Estos representan el 22.5 por ciento del total de los decesos.
Este flagelo que ha causado luto y dolor, también tocó a la población universitaria durante ese lapso de tiempo.
Al menos 226 universitarios, el 14.8 por ciento, fueron víctimas de la delincuencia, y de ellos, 121 pertenecían a la máxima casa de estudios, la UNAH, en sus distintos campus a nivel nacional.
Y por último, 151 niños pasantes del nivel educativo primario fueron parte de esa cifra negativa para el país. Ellos significan el 9.9 por ciento del total de fallecidos.
La mayor parte en impunidad
La coordinadora del Observatorio Nacional de la Violencia, Migdonia Ayestas, más allá de las muertes, lamentó que “el 96 por ciento de las muertes de estudiantes ha quedado en la impunidad; si queremos reducir la violencia y mejorar la seguridad ciudadana tenemos que investigar y judicializar”, fustigó. Ayestas recalcó que “el problema es del Estado, las víctimas las ponen las familias y lo que las familias piden es que se pueda establecer qué pasó, el móvil; solo así se puede cerrar el ciclo de dolor que año con año enluta a las familias”. El estudio establece, en relación con los universitarios, que 11 de ellos estudiaban la carrera de Medicina e igual número eran pasantes de Informática Administrativa, mientras que diez de ellos estudiaban Pedagogía. Johana Turcios, estudiante de Banca y Finanzas de la UNAH y parte de la campaña Cero Impunidad del Iudpas, pidió que “no haya más impunidad, esa es la premisa fundamental, si pasan casos pues que se resuelvan, que se haga justicia”