Abren moderno hospital para niños quemados
Es un hospital de referencia en Centroamérica y fue construido a un costo de 105 millones de lempiras. Tiene capacidad para 40 pacientes
Atención especializada y en instalaciones completamente modernas comenzaron a ser tratados ayer 12 niños que sufrieron graves quemaduras en su piel.
Así comenzó a funcionar el primer Centro Hondureño para el Niño Quemado, ubicado a la par del Hospital María, en la colonia Altos de El Trapiche de la capital.
El Ceniq fue inaugurado en el marco de la celebración del Día del Niño, con la presencia del presidente Juan Orlando Hernández y su esposa, la primera dama Ana García de Hernández.
También asistieron los integrantes de la Comisión Especial para la Transformación del Sistema Nacional de Salud; el presidente de la Fundación para el Niño Quemado (Fundaniquem), Omar Mejía; el embajador de Japón en Honduras, Norio Fukuta, y otros funcionarios del gobierno y diputados del Congreso Nacional.
Según las autoridades, el nuevo centro asistencial surgió como referente en Centroamérica y consta de 3,400 metros cuadrados, con una inversión de 105 millones de lempiras. Adicionalmente, se adquirió equipo por 19.3 millones de lempiras. El centro se construyó en dos etapas, la primera comenzó en febrero de 2016 y la segunda en marzo de 2017 y ayer, después de ser equipado en su primera fase, entró a funcionar, con el objetivo de cambiarle la vida a miles de niños que sufran cualquier tipo de quemaduras.
Esfuerzo
Hernández destacó el esfuerzo de los integrantes de Fundaniquem, quienes trabajaron para que el hospital se volviera una realidad.
“Hoy lo que estamos entregando al pueblo hondureño es lo mejor de lo mejor en Centroamérica y lo hemos hecho nosotros, los hondure-
ños, uniéndonos”, destacó el mandatario. Al mismo tiempo agradeció el decidido apoyo de Japón, que ha estado en las buenas y en las malas con Honduras.
En la inauguración participó el jovencito Juan Diego Molina, quien al colgarse de un cable de alta tensión recibió una descarga de 8,000 voltios que le provocaron severos daños en sus extremidadas. Al ver el hospital ya construido, se llenó de alegría, asegurando que este centro era necesario para atender casos como el de él y darles esperanzas de mejores condiciones de vida a los niños.
El doctor Mejía, quien quedó a cargo del hospital, detalló que la capacidad es para 40 pacientes y en este momento ya hay 12 esperando cirugía.
Son 120 personas, desde pediatras, cirujanos, anestesiólogos, técnicos y personal de enfermería los que brindarán atención en la instalación. Indicó que darán servicios especializados a niños con quemaduras de primero a tercer grado.
Octavio Sánchez, ministro de la Secretaría de Salud, afirmó que el Ceniq es un gran paso en la aspiración de mejorar la salud de los hondureños, sobre todo de los niños quemados.
El presidente Hernández y su esposa, junto a los funcionarios del gobierno, recorrieron el centro y compartieron con los primeros pacientitos