Edward Raudales rompe su marca en el asfalto alemán
Cuando el cuerpo de Edward Raudales pasó la Puerta de Brandenburgo dejó que su mente terminara los últimos metros de la línea de meta.
Para entonces todo era ganancia. El fondista catracho sabía que el keniano de 33 años, Eliud Kipchoge, había hecho historia dos horas antes al ganar la Maratón de Berlín en un tiempo récord de dos horas, un minuto y 39 segundos. “Para mí todo es felicidad porque bajé mi marca personal a cuatro horas y seis minutos... en mi vida no exis- ten los retos imposibles”, ha dicho el periodista de 53 años que se dedica a correr por pasión.
La Maratón de Berlín forma parte de la World Marathon Majors (WMM), un torneo que engloba a los seis maratones más importantes del mundo (Nueva York, Boston, Chicago, Londres, Berlín y desde 2013, Tokio); entre los 40 mil participantes, que salieron del parque del Tiergarten, portaba con orgullo la bandera catracha este comerciante que los últimos tres meses se levantó todos los días a las 4:00 de la mañana para batir su récord y enseñarle al mundo los colores de Honduras.
Las condiciones se aliaron con el catracho: una temperatura suave de 20 grados centígrados, un día soleado y la ausencia de viento contribuyeron a su registro. Y mientras Edward Raudales le ponía “stop” a su cronómetro y saltaba en un pie de la felicidad, el fenómeno keniano Eliud Kipchoge se sacaba fotos con una multitud de fanáticos ansiosos de conocer al runner más veloz del mundo