EL LEÓN AFLOJA EN SU LUCHA POR LAS VUELTAS
Jerry Bengtson, que marcó de penal el 1-1 y de cabeza el 2-2, fue de lo poco rescatable de Olimpia. Camellito y Frelys López tradujeron la buena actuación visitante en un punto
El enésimo mal centro de Kevin álvarez colmaba la diminuta paciencia de la feligresía, la última ocasión errada por Bengtson enterraba las esperanzas de triunfo y el pitido final del errático Orlando Hernández firmaba la resignación de una familia olimpista que se iba del Nacional viendo cómo su equipo acusaba la pospérdida del invicto: empate 2-2 en casa ante un digno Honduras EP.
Con ganas, pero sin fineza, el Olimpia de Manolo se atragantó en sus ideas y salió con un empate tan amargo como su propia actuación.
Bengtson, el rescatable
Ni con el 4-3-3 del plan A ni con el del plan B, Olimpia
nunca terminó por carburar y se topó contra los cuestionamientos de su hinchada.
Marcelo Canales y Diego Reyes fueron los mejores blancos de los reproches y Jerry Bengtson se convirtió en uno de los pocos librados de culpa. El Avestruz mostró la ruta con un penal que recibió de Walter Ramos (1-0, al 44) y ratificó su certeza goleadora al cabecear un centro de Elmer Güity, y así rescatar una historia que se había puesto cuesta arriba (2-2, al minuto 68).
El Albo encaminó la victoria, pero terminó remando de atrás para evitar la derrota. Y es que el equipo de Manolo chocó contra sus imprecisiones, tan marcadas como las decisiones del árbitro.
Con el 0-0, el juez agudizó el mal del León: anuló erróneamente un gol a Bengtson por una inexistente falta y no pitó un claro penal del meta
Justin Pérez a Júnior Lacayo.
Invento de Mauro
El León caminaba con el pie izquierdo y eso se ratificaba antes de ir al descanso. El gol de penal que conseguía a su favor en el epílogo del primer acto lo sufría por la misma vía tan solo un minuto después de haberse puesto arriba.
El recostón de Jonathan Paz a Pedro Pablo Mencía era cambiado por el 1-1 de Camellito Delgado al minuto 45+1. El Catrachito agarraba más fuerza y su confianza la plasmaba Mauro Reyes: hacía ingresar como delantero al defensa trinitense André Ettienne. Y la jugada daba frutos. El “3” dejaba en boca de gol a un Frely López que empujaba el 2-1 (57) y enervaba los ya calientes ánimos de la hinchada olimpista. “Jugadores, jugadores, pongan huevos, por favor... movete Olimpia, movete, movete dejate de joder”, retumbaba desde la grada para pedir más moral a un equipo que logró la igualdad, pero que se quedó en el intento de remontada.
Olimpia cedió cinco de seis puntos en sus últimas dos salidas y dejó el liderato a expensas de Motagua...