A pasar Navidad vino carpintero que fue hallado muerto en una caja
Joven fue raptado en la colonia Brisas de Olancho después de la celebración del Año Nuevo y apareció sin vida ayer en horas del mediodía en la colonia Torocagua, al norte de Comayagüela
Con la ilusión de pasar con los suyos las festividades de Navidad y fin de año, viajó desde San Pedro Sula hasta la capital, pero para su desdicha ese momento de regocijo le costaría la vida.
Se trata de Orvin Rolando Pérez Fúnez, un joven carpintero de 26 años de edad, radicado en la ciudad industrial por motivos de trabajo.
El infortunado carpintero fue raptado por desconocidos la madrugada del martes 1 de enero, después de haber departido con sus parientes en el recibimiento del nuevo año, uno de los motivos por los que se había desplazado hasta esta ciudad.
El rapto de Orvin Rolando se produjo entre las 4:00 y 5:00 de la mañana del martes, cuando después de compartir con sus deudos salió de su casa en la colonia Brisas de Olancho de Comayagüela.
Dejaron el cuerpo en una caja
De acuerdo al relato de sus familiares, él solo salió a la calle para saludar y departir un momento con algunos de sus conocidos, a quienes no veía desde hace algún tiempo. En ese momento fue privado de su libertad por sujetos desconocidos.
Desde que sus familiares se enteraron de lo sucedido, lo buscaron por todos lados, pero no había nin- guna señal de él. En horas tempranas del martes llegaron hasta la morgue del Ministerio Público, ya con pocas esperanzas de encontrarlo vivo, pero tampoco allí hallaron información sobre su paradero.
A eso de las 12:00 del mediodía se enteraron de que en una calle de la colonia Torocagua habían encontrado el cadáver de un hombre dentro de un caja de cartón.
Angustiados por la premonición de que fuera Orvin, salieron rápidamente para aquel lugar, constatando la noticia más lamentable.
De la caja de cartón sobresalía la cabeza con el rostro expuesto de un hombre, en efecto, se trataba del joven carpintero, esto derivó en el llanto desmedido de sus seres queridos al ver que el muerto se trataba de Orvin Rolando.
El cuerpo fue dejado en ese lugar alrededor de las 11:35 de la mañana, pero los vecinos de la Torocagua callaron por temor a represalias.
Vino a las fiestas de fin de año
“Vino el 23 de diciembre a pasar la Navidad con nosotros porque él trabajaba en San Pedro Sula y solo vino para esto”, lamentó entre lágrimas una pariente, de quien nos reservamos su identidad.
Asimismo, contó que “hoy tenía que presentarse a la empresa donde trabajaba como carpintero”. El ahora fallecido tenía su hogar en el que había procreado dos niñas y era padre de otro varón de una relación anterior.
Los familiares no se refirieron a qué habría motivado la muerte del muchacho. Ayer hacían el proceso de retiro del cuerpo de la morgue del Ministerio Público y hoy sería sepultado en la capital